Migrante hondureño decide no continuar con la caravana y pide asilo en Guerrero (Video)

jueves, 1 de noviembre de 2018 · 18:47
CHILPANCINGO, Gro. (apro).- Un integrante de la caravana migrante que partió desde Honduras rumbo a Estados Unidos decidió separarse del grupo cuando llegaron a Chiapas, y actualmente se encuentra refugiado en esta capital. Se trata de Jefferson Rodríguez, de 21 años, originario de Juticalpa Olancho, Honduras, quien llegó a México en el primer éxodo por la frontera sur, después de dejar San Pedro Sula para nunca volver “porque allá está muy cabrón”, dice. Entrevistado en la plaza Primer Congreso de Anáhuac, en esta ciudad, el joven de piel curtida y figura espigada explica el motivo por el que desistió de seguir hacia al norte para alcanzar la meta de la Caravana Migrante: Estados Unidos. https://twitter.com/EzequielFloresC/status/1058101536285491201 “Me separé porque al llegar a Estados Unidos también sería ilegal, y si aquí te brindan apoyo y te ayudan a conseguir papeles para trabajar duro, aquí le podemos echar ganas”, expresa. De acuerdo con Jefferson, la mayoría de sus paisanos pretende llegar a Estados Unidos, pero si reciben apoyo en México para quedarse, apunta, deben aprovechar la oportunidad. “Espero estudiar leyes y trabajar. Espero que me acepten, así como me están apoyando”, agrega el hondureño, quien llegó a Guerrero por la región de la Costa Chica, colindante con el estado de Oaxaca. El Centro de Derechos Humanos Minerva Bello, de Chilpancingo, conformado por familiares de personas desaparecidas, ayuda actualmente a Jefferson Rodríguez para los trámites que debe realizar ante las autoridades migratorias para residir en la capital de Guerrero en calidad de refugiado. Al preguntarle sobre la violencia en su país y la experiencia que ha tenido con personas que buscan a sus familiares desaparecidos en Guerrero, de inmediato hace el contraste: “Allá (Honduras) la gente, cuando se desaparece alguien, sólo se quedan callados, allá no forman grupos así, ni organizaciones para nada. Allá mejor te quedas callado o te desaparecen”, sostiene el joven, quien salió de San Pedro Sula, la ciudad más violenta del continente, seguida del puerto de Acapulco. “En mi país la imagen de México es de narcotráfico y secuestro, eso también se mira allá bastante, pero México es bonito, la gente no todos son igual, pero aquí la gente te sonríe tan siquiera, allá no puedes ver mal a nadie porque tienes problemas”. En Honduras, abunda, el narco es mejor que el gobierno. Los narcos ayudan a la gente y por eso el gobierno asumió el control de toda la estructura delincuencial. “Ahora la Mara y el narco trabajan para el gobierno y ellos son los que te desaparecen y nadie dice nada”, señala el joven, y asegura que todos los hondureños que están haciendo declaraciones en medios de comunicación de México prácticamente están sentenciados a muerte, por eso él no piensa regresar. En Honduras, agrega, tampoco existe libertad de expresión, mucho menos prensa independiente, y si algún periodista se atreve a criticar el régimen, simplemente es asesinado. Cuando se le comenta que esa misma situación se vive en México, de inmediato exclama: “No te imaginas de la situación tan grave que se vive allá”. Dice que está consciente de que el éxodo de Centroamérica “es ilegal”, pero cuando algo es necesario se debe hacer. “En mi país todo está mal, está muy cabrón, y los que estamos migrando es porque tenemos la gran necesidad, por eso emigró tanta gente”, remata el primer hondureño que llegó a Chilpancingo, tierra de migrantes, para buscar refugio y solidaridad.

Comentarios