CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Luego de declararse culpable de ocho delitos por evasión de impuestos, falsas declaraciones a un banco y violaciones de la ley de financiación de campañas electorales, Michel Cohen, exabogado del presidente estadunidense Donald Trump, fue sentenciado a tres años de prisión. Entre las acusaciones contra Cohen está la de silenciar durante la campaña presidencial de 2016 a dos mujeres que presuntamente mantuvieron relaciones extramaritales con Trump. La fiscalía había solicitado una pena de entre 51 y 63 meses por la “seriedad” de las “desvergonzadas violaciones” de Cohen de las leyes electorales, y por haber hecho “deliberadamente” declaraciones “falsas” sobre las negociaciones de una potencial Torre Trump en Moscú que finalmente no se construyó. Sin embargo, un tribunal de Nueva York los condenó a tres años de cárcel. Cohen acudió al tribunal acompañado de su familia y se declaró culpable de ocho delitos por evasión de impuestos, falsas declaraciones a un banco y violaciones de la ley de financiación de campañas electorales. Durante su audiencia Cohen propinó un duro golpe a Trump. Dijo que asumía la responsabilidad de sus delitos, “incluidos aquellos que implican al presidente de los Estados Unidos de América. Era mi deber encubrir sus actos sucios”, declaró. Durante más de una década, el controvertido abogado dijo que daría todo por el ahora presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y hoy decidió declararse culpable de diversos cargos por acciones vinculadas a su exjefe. “Soy el tipo que recibiría una bala por el presidente”, dijo alguna vez Michael Cohen. En una entrevista para Vanity Fair en septiembre de 2017, también declaró su lealtad al mandatario estadunidense y hace unas semanas, dijo al canal televisivo ABC: “Para ser absolutamente claro, (…) mi familia y mi país tienen mi principal lealtad”. El 21 de agosto pasado, Cohen formalizó un acuerdo con las autoridades para declararse culpable de distintos delitos de fraude y de violación de finanzas de campaña electoral, relacionados con sus propias finanzas y con acuerdos alcanzados con mujeres para silenciar supuestas relaciones extramaritales de Trump. Apodado el “pitbull” del magnate, Cohen ha estado vinculado a Trump desde 2007, cuando inició su periplo en la Organización Trump con un alto cargo y se convirtió en su asesor legal personal. Según su perfil de la plataforma Linkedin, Cohen estuvo ligado al magnate durante más de 11 años hasta el pasado junio, fecha en la que el presidente aseguró que ya no era su abogado personal, aunque reconoció que siempre le “gustó”. Con información de EFE