CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una niña de siete años, originaria de Guatemala, falleció de deshidratación en un centro de detención de la Patrulla Fronteriza estadunidense (CBP), el pasado sábado 8, y no queda claro si los agentes le dieron alimentos y atención médica previo a que su temperatura corporal se disparara, informó hoy el diario ‘The Washington Post’. La menor viajaba con su padre en un grupo de 163 personas que cruzaron el desierto de Nuevo México y se entregaron a las autoridades migratorias de Estados Unidos. Todos fueron llevados a un centro de detención la noche del jueves 6. Horas después la niña, quien “no había comido ni tomado agua en varios días”, empezó a tener fuertes temperaturas. Las autoridades la trasladaron por helicóptero a un hospital de El Paso, Texas, pero sufrió un paro cardiaco. Falleció menos de 24 horas después de llegar al centro de salud. El ‘Washington Post’ reportó que la CBP se tardó una semana en comunicar el evento, y su vocero aseveró que los agentes “tomaron todas las medidas posibles para salvar la vida de la niña”. En noviembre pasado, los agentes de la CBP detuvieron a 25 mil 172 “miembros de unidades familiares” en la frontera sur de Estados Unidos, es decir padres e hijos.