CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y Donald Trump anunciaron este martes inversiones por 35 mil 600 millones de dólares para México y Centroamérica como parte del Plan de Desarrollo Integral propuesto por el presidente mexicano y cuyo principal objetivo es frenar la migración. La mayor parte del monto, 25 mil millones de dólares, es el que prometió invertir el gobierno mexicano en el sur del país a lo largo de los próximos cinco años, a razón de 5 mil millones de dólares por año. De acuerdo con el canciller Marcelo Ebrard, a partir del próximo año, el gobierno de Estados Unidos buscará inversiones por 5 mil 800 millones de dólares en Honduras, Guatemala y El Salvador, y otros 4 mil 800 millones de dólares para México. Del monto para México, 2 mil millones de dólares se aplicarán al sur del país y el resto, 2 mil 800 millones, en regiones no precisadas. En el acuerdo, mostrado en Twitter por Ebrard, se establece que los recursos de Estados Unidos se aportarán a través de la Corporación para Inversiones Privadas en el Extranjero (OPIC, por sus siglas en inglés). Se trata una institución financiera que depende del gobierno, pero cuya misión es ayudar a empresas del sector privado a establecerse en mercados emergentes sin recurrir al erario estadunidense. En el acuerdo se establece también que los gobiernos de López Obrador y Trump también establecerán reuniones regionales de trabajo para monitorear las inversiones, y convocarán a una cumbre bilateral empresarial en el primer trimestre del año entrante.

“Son muy buenas noticias para México”, presumió el canciller Marcelo Ebrard Casaubón al terminar la presentación de las medidas. “Los compromisos aquí establecidos significan más que duplicar la inversión extranjera para el sur de México”, abundó.

Tales inversiones estaban contempladas en el Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica, que los gobiernos de México, Guatemala, Honduras y El Salvador pactaron el pasado 1 de diciembre; menos de 24 horas después, Ebrard viajó a Washington y presentó las bases del plan al gabinete de Trump para que Estados Unidos participe en la inversión. “Estados Unidos reconoce con beneplácito el plan para lograr estos objetivos”, planteó la declaración conjunta emitida hoy, y que Ebrard leyó en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) sin dejar espacio para las preguntas. A través de esta iniciativa, el gobierno mexicano pretende detonar proyectos de desarrollo en la región que engloba el sur de México y el norte de Centroamérica, para evitar que cientos de miles de personas salgan cada año de sus países hacia Estados Unidos.