CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Funcionarios de Estados Unidos y México se reunirán en los próximos días en busca de un acuerdo técnico para la aplicación de las nuevas medidas sobre asilo, anunció la secretaria de Seguridad Nacional del gobierno de Donald Trump, Kirstjen Nielsen. Durante una audiencia con el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Nielsen se refirió a la decisión de invocar a la Sección 235 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA, por sus siglas en inglés) a fin de regresar a México a los solicitantes de asilo de terceros países que ingresen desde territorio mexicano, donde esperarán el resultado de su solicitud. Los migrantes involucrados recibirán por parte de México visas humanitarias y la posibilidad de pedir trabajo mientras aguardan en territorio mexicano los resultados de su solicitud de asilo, destacó la funcionaria. Kirstjen Nielsen subrayó ante los legisladores que el objetivo de la reunión binacional es lograr que la puesta en marcha de las nuevas directrices se haga de manera transparente y efectiva, y asegure un flujo ordenado y seguro de migrantes. “Esperamos trabajar con nuestros socios mexicanos para lidiar con el contrabando, tráfico y cruce ilegal en toda Centroamérica de una vez por todas”, dijo. Durante la audiencia, el presidente del Comité Judicial, el republicano Bob Goodlatte, felicitó a Nielsen por haber llegado al acuerdo con el programa “Quédense en México”, mientras que la demócrata Zoe Lofgreen aseguró que la Sección 235 no incluye a los solicitantes de asilo. “Enfrentaremos esta crisis de frente, defenderemos el estado de derecho y fortaleceremos nuestros compromisos humanitarios”, sostuvo Nielsen, de acuerdo con un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional. “Los extranjeros que intentan utilizar el sistema para ingresar ilegalmente a nuestro país ya no podrán desaparecer en Estados Unidos, donde muchos se saltan las fechas de la Corte. En cambio, esperarán una decisión de inmigración mientras estén en México. ‘Captura y liberación’ será reemplazado por ‘captura y retorno’. “Al hacerlo, reduciremos la migración ilegal eliminando uno de los incentivos clave que alienta a las personas a emprender el peligroso viaje a Estados Unidos. Esto también nos permitirá centrar más la atención en aquellos que en realidad están huyendo de la persecución”, aseveró. Según el Departamento de Seguridad Nacional, inmigrantes ilegales aprovechan lagunas legales sobre el asilo, al grado de que tienen una acumulación abrumadora de solicitudes, que suman ya 786 mil casos pendientes de resolverse. La mayoría de casos no son meritorios y para cuando los jueces resuelven, muchos de los solicitantes desaparecen, argumentó Seguridad Nacional (con información de Notimex).