CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La procuradora general de Justicia local (PGJ-CDMX), Ernestina Godoy, negó que haya despidos masivos en la dependencia que encabeza y aclaró que solo hubo un recorte de 24 plazas, como parte del proceso de reestructuración interna, debido a la política de austeridad del gobierno capitalino. En su primera conferencia del año, y luego de denuncias en las redes sociales de presuntos despidos masivos en la Procuraduría, explicó que en este proceso se implementaron nuevos tabuladores y fue necesario hacer ajustes que se pudieron haber mal interpretado. “Para que quede todo regularizado, les pidieron a los trabajadores de confianza que renunciaran a su anterior nivel y de inmediato se les daba el nombramiento ya con el nuevo tabulador sin perder ningún elemento. Sin embargo, algunos pensaban que era un despido, pero no fue así, es una cuestión de reestructura… Se han ido convenciendo en estos días que es una reestructuración”, dijo. Según Godoy Ramos, el recorte de 24 personas fue “pequeño” a comparación de los que ha habido en otras dependencias. Ese número menor, detalló, se debe a que, como parte del proceso de transición de Procuraduría a Fiscalía, el Congreso de la Ciudad de México le aprobó un fondo especial de 10 millones de pesos. En el 2018, siguió, la PGJ tenía mil 80 plazas de confianza, pero a partir del 1 de enero de 2019 bajó a mil 59, es decir, 21 menos. De acuerdo con la funcionaria, de esos movimientos, se planea que la dependencia tenga un ahorro de 15%, al pasar de 508 millones de pesos en 2018 a 431 millones en 2019. Ese recurso será invertido en infraestructura para mejorar la atención a los ciudadanos. La funcionaria dijo que en esa reestructura hallaron 141 plazas que “no requerían ningún requisito para entrar, ni lineamientos para trabajar”. Entre algunas irregularidades que encontraron está la existencia de choferes con sueldos muy altos, más que los de los asesores del procurador, así como enlaces administrativos, cuya existencia no se justificaba. Por ello, aplicaron ajustes a la baja. Fallan controles de confianza a PDI La procuradora Ernestina Godoy explicó el caso de 24 policías de Investigación (PDI) que fueron dados de baja debido a que reprobaron los controles de confianza aplicados por la Secretaría de Seguridad Pública -hoy Ciudadana- (SSC) como parte del proceso legal que se hace cada dos años. Según dijo, decidió suspender la separación de dichos elementos de la Procuraduría, debido a que “en una revisión minuciosa” con el jefe de la policía, Jesús Orta, “no nos explicábamos la razón porque algunos de los reprobados es gente que tiene muchos años de trabajo, la mayoría, con niveles de preparación altos, con hojas de incidencia prácticamente limpias en muchos casos y reprobaron”. La exdiputada añadió que les pareció “raro que algunos fueran separados así. Entonces decidimos que íbamos a suspender esto. Los 24 van a ser revalorados con nuestros instrumentos y se tomarán las medidas conducentes”.