MONTERREY, NL., (apro).- La inseguridad que se vive en la entidad ha provocado que el gobierno coloque rejas alrededor del Palacio e incremente el número de guardias para prevenir un posible ataque en las instalaciones, reconoció el secretario de Seguridad del estado, Aldo Fasci Zuazua. Después de que el domingo por la madrugada fueran desalojados manifestantes que pernoctaban en los pasillos en protesta por el inminente incremento a las tarifas del transporte urbano, el funcionario dijo que hubo una coincidencia desafortunada, y que tuvieron que retirar a estas personas como parte de las acciones para asegurar el inmueble. En entrevista efectuada en la sede del Ejecutivo, Fasci recordó que en la semana pasada hubo tres ataques contra policías de Fuerza Civil (FC), y la semana antepasada otros más, en una respuesta de la delincuencia organizada por los golpes que les han propinado a sus líderes. Por ello, estimó que continuarán las agresiones contra los uniformados y contra las instalaciones relacionadas con seguridad pública, que son blanco potencial de los pistoleros. Dijo que FC ha participado en todos los operativos en los grupos de coordinación con autoridades Federales, por lo que son tomados como referentes en estas operaciones contra el crimen. “Tenemos información muy clara y precisa de que van a continuar los ataques. Por eso hemos dado la orden de restringir y tomar precauciones en instalaciones de seguridad, entre ellas Palacio. Aquí es sede del Ejecutivo, del Consejo de Coordinación de Seguridad, aquí estamos todos los días. Tenemos qué tomar precauciones, por lo menos en forma provisional y temporal. Y a todos pedimos comprensión”, expuso. Sobre el arresto de los manifestantes, de la agrupación Únete Pueblo, que fueron desalojados de Palacio, dijo que le reportaron que algunos portaban objetos peligrosos, que, luego se supo, eran unas tijeras y un cuchillo para partir un pastel. Tras reservar su opinión sobre el hecho, pero en una actitud que daba a entender su reproche por la detención, dijo que garantizará el derecho de las personas de manifestarse y agruparse. Sin embargo, no permitirán que regresen estas personas, pues su protesta ocurre durante la coincidencia del blindaje al Palacio. Explicó que la ciudadanía podrá continuar con sus visitas al inmueble, dentro del cual hay un museo abierto al público, aunque los recorridos tendrán que hacerse con restricciones. “Tenemos que garantizar que los niños estén seguros. Imagínate, todo el personal de seguridad del estado y la región aquí reunido, con que nos truene un cohete, no una bomba, y si hay niños abajo, qué imagen estaríamos dando”, concluyó.