CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) deploró que las 23 personas centroamericanas que fallecieron ayer en un accidente carretero en Chiapas viajaban escondidas en un camión debido a la “falta de opciones legales” para ingresar a México. Inicialmente la Fiscalía General del Estado había informado que 25 personas fallecieron y posteriormente ajustó a 23 el número de víctimas y 33 heridos. Dos de las personas fallecidas eran niños, uno de dos años y otro de siete. En un comunicado, el ACNUR lamentó “profundamente” el incidente y deploró que “la falta de opciones legales para ingresar al territorio y el uso de la detención propician que las personas se vean obligadas a viajar en la clandestinidad, tomando rutas peligrosas”. Según las autoridades, alrededor de las 18 horas, un camión de tres toneladas marca Ford tipo Super Duty, de color blanco y sin placas de circulación, volcó a la altura del río Bombaná, a 5 kilómetros del municipio de Soyaló. El vehículo se dirigía hacia Veracruz. En su caja se encontraban decenas de personas centroamericanas amontonadas, al menos 23 de las cuales fallecieron en el golpe. El chofer huyó tras el accidente.