MADRID (apro).- El líder opositor venezolano Leopoldo López y su familia permanecen en la embajada de España en Caracas desde la madrugada de hoy, tras ser liberado en el marco del levantamiento militar que anunció Juan Guaidó, el autoproclamado presidente venezolano, confirmaron fuentes gubernamentales españolas. Tras un breve paso por la embajada chilena, López y su familia se refugiaron en la embajada española, cuyas autoridades en Madrid señalan que no ha solicitado asilo. El gobierno español anunció que no esperan hacer ningún movimiento político o diplomático hasta que el político venezolano defina cuál es su propósito al refugiarse en la legación en Venezuela. El gobierno de España decidió apoyar la autoproclamada presidencia de Juan Guaidó, en sintonía con la posición de la Unión Europea, como encargado para la convocatoria de nuevas elecciones bajo los parámetros internacionales de limpieza y legalidad para que surja un nuevo gobierno en Venezuela. Sin embargo, este martes, unas horas después de conocerse el llamamiento de Guaidó a un levantamiento militar, aquí la portavoz del gobierno de Pedro Sánchez, la ministra Isabel Celaá, declaró que “España no apoyará ningún golpe militar”. Posición comprometida Por tanto, una eventual petición de asilo del exalcalde del caraqueño ayuntamiento de Chacao, colocaría a España en una posición comprometida en el equilibrio diplomático, por haber defendido la realización de elecciones y no una convocatoria de levantamiento, en cuyo marco fue liberado López. Jesús Silva, responsable de la legación diplomática española en Caracas fue quien acogió al líder opositor, a su esposa, Lilian Tintori y a su hija, en medio de la crisis que se recrudeció el martes, con un muerto y un centenar de heridos en los choques con las fuerzas del gobierno de Nicolás Maduro. Desde la detención de Leopoldo López en 2014, acusado de incitación a la violencia, España se posicionó pidiendo su liberación inmediata. En 2017, fue puesto en prisión domiciliaria de donde ayer fue liberado gracias a la acción de miembros de las fuerzas armadas que se sublevaron contra Maduro. El tema venezolano provocó otras reacciones políticas en España, como la del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, quien condenó “sin matices” lo que consideró un “golpe de Estado” en Venezuela. El líder de izquierda puso en cuestionamiento la legitimidad de Juan Guaidó y en torno a la eventual solicitud de asilo de Leopoldo López, Iglesias fue categórico en señalar que España debe tener una “posición extensiva del derecho de asilo y de refugio” y este caso no se debe priorizar sobre otras muchas solicitudes. El dirigente del Partido Popular (PP), pablo Casado, exigió que “el gobierno tiene que garantizar la seguridad de Leopoldo López, Lilian Tintori y de su hija”.