WASHINGTON (apro). – A horas de imponer aranceles comerciales a China por un valor aproximado de 250 mil millones de dólares, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sentenció que su gobierno no tiene prisa ni negocia acuerdos comerciales de último minuto.

“Las tarifas (arancelarias) harán mucho más fuerte a nuestro país, no débil. Siéntense y observen. Al mismo tiempo, China no debe renegociar acuerdo con Estados Unidos de último minuto. Éste no es el gobierno de (Barack) Obama, o de Joe (Biden) el dormilón, quien dejó que China se saliera con la suya con un asesinato” (sic), dice uno de los varios mensajes que escribió Trump esta mañana de viernes en su cuenta personal de Twitter.

En el primer minuto de este 10 de mayo, entraron en vigor tarifas arancelarias de hasta el 25% en productos que importa Estados Unidos de China, provocando nerviosismo y volatilidad en los mercados bursátiles del planeta ante la posible guerra comercial de dos colosos. El aumento de 15% a los productos chinos afectados por la acción unilateral del presidente de Trump, ocurrió por encima de las negociaciones que se celebran en Washington para encontrar una solución entre el viceprimer ministro de Beijing, Liu He, Steve Mnuchin, secretario del Tesoro, y Robert Lightizer, representante comercial de la Casa Blanca.

“Manufacturen sus productos en Estados Unidos y no habrá tarifas”, condicionó Trump a China en otro de sus mensajes en Twitter.

Las medidas unilaterales tomadas por el gobierno de Trump, de acuerdo con los estudios del propio Departamento de Comercio de Estados Unidos, provocará que cada familia de cuatro integrantes pague 767 dólares más al año; por la adquisición de los productos afectados.

“Las tarifas traerán mucha más riqueza a nuestro país que un acuerdo comercial fenomenal bajo las reglas tradicionales. También, es algo más fácil y rápido de lograr. A nuestros agricultores les irá mejor y más rápido y las naciones que se mueren de hambre podrán recibir ayuda. Excepciones habrá en algunos productos, de lo contrario, se buscarán alternativas… “Productos de nuestros grandiosos agricultores en mayores cantidades que ni siquiera China puede lograr, se enviarán como ayuda humanitaria a países que se mueren de hambre. Mientras tanto, continuaré negociando con China con la esperanza de que no pretendan rehacer todo”, destacó Trump en otros dos mensajes matinales.

Mientras el mandatario estadunidense publicaba en Twitter, Mnuchin y Lightizer volvieron a reunirse con Liu y su equipo de asesores, para intentar concretar una solución por lo menos de corto plazo, que evite las medidas en reciprocidad por parte del presidente chino, Xi Jinping, que se mantiene en la posición de imponer aranceles a las importaciones estadunidenses.

“Las pláticas con China continúan bajo un ambiente amistoso, no hay prisa”, acotó Trump en otro de sus mensajes en Twitter.

El déficit comercial de Estados Unidos con China se incrementó en 1.5% el pasado mes de marzo (50 mil millones de dólares), lo que, de acuerdo con varios funcionarios de la Casa Blanca, conllevó a Trump a tomar la decisión de imponer las tarifas. Una guerra comercial entre Estados Unidos y China tendría efectos muy negativos para las economías más ligadas comercialmente a estos dos colosos de la economía global. Entre los países que podrían sufrir las peores consecuencias de la disputa comercial entre Beijing y Washington, se menciona a México y Canadá, por el volumen de sus compromisos de intercambio de bienes y servicios que tienen con ambos. La Casa Blanca informó que la noche de este jueves, antes de que entraran en vigor las tarifas impuestas a China, Trump se comunicó por teléfono con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. De una conversación telefónica con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, la Casa Blanca no ha dicho nada.