La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) inició el proceso de inspección por el derrame de más de tres mil litros de ácido sulfúrico al Mar de Cortés por parte de la Terminal Marítima de Guaymas, operada por una subsidiaria de Grupo México. La procuraduría confirmó a través de un comunicado que la empresa dio informe de la existencia del derrame, por lo que ordenó una visita para conocer los posibles daños al ambiente. También, detalló que se levantó el acta correspondiente y que está corriendo el plazo legal de cinco días para que la empresa pueda presentar más detalles sobre lo ocurrido la tarde de ayer en dicha terminal. Asimismo, la Profepa dijo que continuará con el procedimiento administrativo en todas sus fases, a fin de emitir la resolución que corresponda conforme a derecho. Alrededor de las 15:00 horas de ayer, presuntamente se presentó una falla en una de las válvulas durante el proceso de trasvase llamado “prueba y drenado”, lo que provocó el derrame de más de 3 mil litros en el mar de Cortés, en Sonora.