La policía italiana y el FBI frustran el regreso de los clanes italoamericanos a Sicilia

miércoles, 17 de julio de 2019 · 18:45
ROMA (apro). — La muerte de Totò Riina, uno de los mayores capos mafiosos del siglo XX, revolvió las aguas e hizo creer a sus antiguos rivales de la mafia siciliana que podían recuperar el poder que él en su momento les había quitado en la famosa organización criminal italiana. Esta intuición que, la policía italiana tuvo desde el fallecimiento de Riina en 2017, pasó este miércoles de hipótesis a certeza. Unas 19 personas, casi todas pertenecientes al clan de los llamados palermitanos, la mafia tradicional de Sicilia, perdedora en los 80 de la guerra contra los corleoneses del hoy difunto Riina y vinculada con la familia italoamericana de los Gambino, fueron arrestadas en un gran operativo policíaco-judicial desarrollado en Italia y Estados Unidos. El operativo, apodado de “Nueva Conexión” y en el que participaron más de 200 agentes antimafia de la policía italiana y del FBI estadunidense, se realizó tras una larga investigación durante la cual fueron interceptadas y grabadas las conversaciones de los detenidos mientras discutían de los escenarios tras la muerte de Riina. Razón por la que fueron imputados por asociación mafiosa, extorsión y fraude, entre otros delitos, precisó la policía italiana. “A nosotros nadie nos tiene que obstaculizar, ni el Papa de América, o San… no. (…) Dice que somos los reyes de Palermo (la capital de Sicilia), todos nos vienen a buscar a nosotros”, se escucha en una grabación, donde habla un miembro de la familia Lo Cascio, emparentado con los influyentes Inzerillo. “Ahora vemos (qué pasará), ahora con esta muerte (de Riina)”, se oye en otra de las transcripciones de una reunión entre miembros del clan de los Inzerillo, esta familia mafiosa de Palermo exiliada en Estados Unidos tras que Riina ganara la guerra en los 80 y que en el país norteamericano se enriqueció con sus actividades ilícitas. De ahí también que entre los detenidos figure el nombre de Thomas Gambino, nacido en Staten Island (Nueva York) y considerado por el FBI una de las figuras claves de la homónima familia italoamericana. Y que, además de las casas de los detenidos en Sicilia, la policía italiana y el FBI también allanaran las residencias de Thomas Gambino en dicha localidad, y la de otros personajes también considerados enlaces entre los mafiosos sicilianos y sus primos estadunidenses en Filadelfia y New Jersey. “Las investigaciones fueron sobre el mandamiento (una circunscripción administrativa, según la organización territorial mafiosa) del barrio palermitano de Passo di Rigano (Sicilia) y han servido para reconstruir la relación entre los hombres de los clanes palermitanos de Cosa Nostra y representantes de la criminalidad organizada estadunidense, en particular los poderosos Gambino de Nueva York”, observó la policía italiana. “Entre los arrestados, destacan figuras como la de Tommaso Inzerillo y su primo Francesco. Diezmados durante la segunda guerra de mafia liderada por Riina, los Inzerillo fueron obligados, después del homicidio de Salvatore Inzerillo en 1981, a escapar a Estados Unidos para poder sobrevivir”, recordó la policía. “Regresaron a Italia en los primeros años del nuevo siglo. (…) Lograron reconstruir las filas de la familia en Passo di Rignano. Gracias a una gruesa red de afiliados (…) ejercieron un férreo control del territorio y han condicionado el tejido económico”, añadieron. Estos clanes también participaron, según la policía, en la reunión en mayo de 2018 en la que se determinó la nueva organización y el candidato a ser ‘jefe de los jefes’ de la mafia siciliana, Settimo Mineo, quien finalmente fue detenido a finales del año pasado. De igual manera, también se había reactivado la relación con Frank Calí, conocido como el ‘embajador de los mafiosos sicilianos’ en Estados Unidos, y quien fue asesinado en marzo pasado en al aire libre en Nueva York (en circunstancias que siguen siendo opacas). La policía también precisó que los arrestados llevaban adelante actividades ilegales en el suministro de alimentos al por mayor, puntos de venta de apuestas y apuestas en línea, algo que llevó a la incautación de empresas y bienes por un valor total de tres millones de euros. En otro de los materiales difundidos por la policía, también se aprecian imágenes de una reunión de Thomas Gambino y representantes de los Inzerillo a bordo de bote inflable en el golfo de Mondello, en Palermo. Durante la reunión, los interceptados discuten sobre cómo repartirse los ingresos derivados de una posible venta de un terreno en República Dominicana, formalmente de propiedad del difunto Frank Calí. Se escribe así otro capítulo en los intentos de reorganización de la Mafia siciliana, un grupo criminal que en los últimos años ha ido perdiendo fuelle ante el creciente dominio de la Ndrangheta de Calabria y la Camorra de Nápoles, y los múltiples golpes de las autoridades de Sicilia, la isla italiana donde tantas guerras de mafia han conllevado el desarrollo de una de las mejores unidades de investigación sobre el crimen organizado del mundo. “Cosa Nostra estadunidense, cuya presencia se remonta a finales de 1800, parece haber logrado cierta autonomía, aun manteniendo una colaboración criminal con sus homólogos sicilianos”, ya se leía en uno de los últimos informes de la Dirección de Investigación Antimafia (DIA) de Italia. “Esta situación podría cambiar”, añadía la institución italiana, al recordar que, tras una serie de arrestos realizados tanto en Italia como en Estados Unidos, esta mafia se encuentra ahora en “una fase de reorganización”. “En este contexto, algunos mafiosos que han huido o se han exiliado en Estados Unidos podrían regresar a Italia”, continuaba la DIA. Estos últimos serían precisamente los integrantes de la llamada ‘mafia que perdió’, aquellos clanes que se enfrentaron a Riina, añadió la institución italiana. Más aún no se trata de la única operación reciente que involucra a miembros de los clanes italoamericanos. En 2011, más de 120 mafiosos fueron detenidos en otra operación en el este del país, una de las más grandes de la historia de Estados Unidos. El 4 de agosto de 2016, en cambio, la policía de Nueva York arrestó a 46 mafiosos de cuatro —los Genovese, Gambino, Lucchese y Bonanno— de las cinco familias. La coalición criminal comerciaba con armas, estafaba, robaba números de tarjetas de crédito y contrabandeaba cigarrillos y gasolina. Los acusaron de conspirar para extorsionar.

Comentarios