MONTERREY, N.L. (apro). - La policía estatal Fuerza Civil (FC) sustituirá a las corporaciones de los municipios conurbados de Benito Juárez y Cadereyta, luego de la ola reciente de crímenes que han ocurrido entre esas dos localidades.

El secretario General de Gobierno de Nuevo León, Manuel González Flores, informó que el jueves publicará un decreto para que FC tome control de la seguridad de Cadereyta Jiménez, ubicado 30 kilómetros al oriente de la capital, a petición del alcalde, Ernesto Quintanilla Villarreal.

La misma policía estatal ya había intervenido el municipio jimenense el año pasado, también por motivo del incremento de violencia.

El funcionario señaló que, para acordar la manera de la intervención, se comunicarán con el alcalde de Juárez, Heriberto Treviño, quien, de acuerdo con información que ha surgido en redes sociales, se encuentra de vacaciones en Europa, en medio de la crisis de homicidios que vive el municipio.

Las intervenciones tendrán vigencia de 30 días a partir de que se publique el decreto con posibilidad de prorrogar el plazo, si es que continúan las condiciones de inseguridad que requieran la presencia de la policía estatal, dijo González.

Por su parte, el secretario de Seguridad pública del Estado, Aldo Fasci Zuazua, señaló que en la misma acción participarán elementos del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional que ya están desplegados en la entidad, como parte del convenio de seguridad estratégica firmado entre los estados de Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas.

Fasci señaló que la violencia se ha incrementado en esa zona debido a que ahí han sido capturados líderes del crimen organizado, como ocurrió el martes, cuando fue arrestado a balazos un capo identificado como César, de 24 años, cabecilla del Cártel del Noreste, que operaba en Cadereyta.

Explicó que la acción que emprenden ahora es para evitar que los reacomodos en los grupos criminales provoquen más violencia.

En el anuncio estuvo también el fiscal general de la entidad, Gustavo Adolfo Guerrero.

Apenas el lunes fueron localizados en Cadereyta, sobre la carretera a Chihuahuita, los cuerpos de cuatro hombres que fueron asesinados con arma blanca.