CIUDAD DE MÉXICO (apro).-La velocista sudafricana Caster Semenya sufrió un revés este martes luego de que el Tribunal Federal Suizo echó abajo la suspensión temporal de las regulaciones que impuso la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) acerca de que las corredoras que tienen de manera natural altos niveles de testosterona deberán reducirlos si quieren seguir compitiendo. Semenya había apelado ante el Tribunal Suizo la decisión del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que respaldó las regulaciones introducidas por la IAAF. Por esta decisión, la doble campeona olímpica en los 800 metros no podrá defender su título en el Campeonato Mundial de Atletismo que tendrá lugar en Doha, en septiembre próximo. “Estoy muy decepcionada de no poder defender el título que tanto me costó ganar, pero esto no me impedirá continuar la lucha por los derechos humanos de todas las atletas involucradas”, dijo Semenya en un comunicado. https://twitter.com/caster800m/status/1156271249053691904?s=20 En junio pasado, el Tribunal Suizo suspendió de manera temporal el fallo de la IAAF, por lo que Semenya -y todas aquellas corredoras que presentan un desarrollo sexual diferente (DSD) y que compiten en eventos que van desde los 400 metros a los 1500 metros- pudo seguir compitiendo sin tener que medicarse para reducir sus niveles de testosterona. Bajo las nuevas regulaciones de la IAAF, ratificadas por el TAS y ahora por el Tribunal Federal Suizo, las atletas con altos niveles naturales de testosterona deben reducirlos médicamente a menos de 5 nanomoles por litro de sangre seis meses antes de una competencia. Esta cantidad representa más del doble del rango femenino normal de menos de 2 nanomoles por litro de sangre. Antes de la prohibición de la IAAF el umbral de tolerancia se encontraba en los 10 nanomoles, lo que, según estudios citados por la IAAF, hacía que quienes se aproximaran a ese límite dispusieran de una mayor masa muscular, fuerza y hemoglobina que el resto de corredoras y, por lo tanto, les otorgara ventaja.