MÉRIDA, Yuc. (proceso.com.mx).- El movimiento estudiantil “UADY sin acoso” recriminó a la Universidad Autónoma de Yucatán la impunidad de estudiante acusado de violar a otra alumna en un viaje escolar –agresión por la que únicamente fue suspendido ocho días y seis meses sin prácticas- tras exigir a la institución que “no forme feminicidas”. El pasado jueves, la rectoría de la máxima casa de estudios yucateca dio a conocer su “Protocolo para la prevención, atención y sanción de la violencia de género, discriminación, hostigamiento, acoso y abuso sexual” e instaló su comité encargado de aplicarlo. Dicho protocolo surgió en respuesta a la serie de denuncias y protestas estudiantiles por presuntos casos de hostigamiento, abuso sexual y discriminación contra estudiantes de la institución. El movimiento “UADY sin acoso” emitió un comunicado dirigido a la universidad. Dicho escrito señala: “amanecemos todos los días con nueve feminicidios más, nueve mujeres que fueron agredidas, violadas y finalmente asesinadas: mujeres que seguramente deseaban morir desde el primer minuto de sufrimiento”. Añade que en Yucatán “la violencia no es descarada, la violencia es resguardada: es decir, se manifesta en el ambiente privado en donde el agresor está lejos de los amigos, lejos de la gente que él sabe que le guardan cariño y respeto”. El movimiento expresó su solidaridad con la víctima y exigió a la UADY que el protocolo no sea sólo letra muerta.