CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Aunque en enero pasado, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no preveían ningún recorte en el suministro del Sistema Cutzamala a la capital, esta mañana anunciaron que a partir de la próxima semana reducirán su caudal, por lo que unas 500 mil personas de Iztapalapa y Tlalpan serán las más afectadas. En conferencia, las autoridades, incluido el Estado de México, argumentaron que la medida disminuirá el suministro en 2 metros cúbicos por segundo (m3/seg), es decir, unos 86.4 millones de litros al día tanto en la capital como en territorio mexiquense. La medida se aplicará a partir del lunes 9 y durante lo que resta del año, debido a una “sequía severa” por la falta de lluvias en agosto pasado que afectó la captación de agua en las presas del Cutzamala que ahora están al 75% de capacidad. La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, detalló que se ha tenido un año con mayor sequía de la esperada, por lo que los gobiernos acordaron tomar “medidas inmediatas” y buscar otras fuentes de abastecimiento. “Conagua ha tomado la decisión de reducir 1 metro cúbico por segundo a la ciudad y 1 metro cúbico por segundo al Estado de México, de tal manera que la ciudad a partir de la próxima semana deja de recibir 10 metros cúbicos por segundo y comenzará a recibir 9 metros cúbicos por segundo. El Estado de México va a pasar de 6.5 a 5.5 metros cúbicos por segundo de suministro del Cutzamala”, explicó. Por ello, dijo que su gobierno ya prepara pipas para suministrar el líquido en las colonias más afectadas. La directora de Conagua, Blanca Jiménez, presentó datos del Monitor de Sequía de la Comisión, que mostraron que, en la primera quincena de agosto, más de 30% del país enfrentó condiciones de sequía “moderada a excepcional”. Ello, dijo, representa una superficie mayor a la afectada a finales de julio. Por ello, es necesario que la población y los tres órdenes de gobierno tomen conciencia de la importancia de cuidar el agua. La funcionaria añadió que mediante el Programa Nacional Contra la Sequía (PRONACOSE), la Conago implementa medidas preventivas y de mitigación de la sequía, consistentes en identificar fuentes de abastecimiento alternas emergentes, promover un uso eficiente del agua y realizar campañas de educación y concientización, entre otras. Jiménez explicó que el 1 de enero de 2019, las presas del Sistema Cutzamala estaban llenas hasta 96%, “el mejor nivel histórico entre 1996 y 2018”. Ello hizo posible que el sistema suministrara un volumen “ligeramente mayor” al promedio de enero a agosto de 2019. No obstante, alertó que “si el año que entra es un año seco, el sistema estaría en una peor condición”. Dijo que para estar preparados para el 2020 se debe hacer una reducción en la Zona Metropolitana del Valle de México” en lo que resta del año. El coordinador general del Sacmex, Rafael Carmona, recordó las labores que hace la dependencia: sectorización de la red de agua potable para identificar zonas donde se pueda recuperar caudales; reparación de fugas con 150 brigadas; y macro medición para tener información más confiable de cómo se suministra el líquido en la red. Las autoridades llamaron a la población a hacer un uso responsable del agua y contribuir a su preservación. El pasado 17 de enero, Carmona informó que, hasta ese momento, el Sacmex y la Conagua no tenían previstos cortes en el suministro del Sistema Cutzamala que afectaran a los capitalinos. “Estaremos trabajando siempre en conjunto y de la mano con la Conagua para que las acciones que sean necesarias para conservar ese gran sistema se den con el menor recorte de agua, con las menores consecuencias en términos de abastecimiento a la población de nuestra ciudad. Al momento no hay ninguna fecha propuesta para un recorte”, dijo en conferencia en la que presentó el Plan de Trabajo del Sacmex. Al inicio de su administración, Sheinbaum Pardo destacó que el Sacmex tendría una “inversión histórica” de cinco mil 977 millones de pesos para el programa de obras que realizaría durante 2019. Comparado con años anteriores, esa cantidad representó el doble del presupuesto asignado y sería aplicado para garantizar el suministro de agua potable a la población y mejorar la infraestructura hidráulica en la capital.