CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un juez federal y el propio Joaquín El Chapo Guzmán Loera desconocieron la supuesta representación que ejercen los abogados Juan Pablo Badillo Soto y José Luis González Meza, quienes desde el año 2016 han interpuesto amparos y diversos recursos judiciales en contra de su proceso de extradición. A decir del Juzgado Decimotercero de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México en el juicio de amparo 709/2019, éste desechó el juicio de garantías antes por resultar “notoriamente improcedente la demanda”, ya que mediante un escrito Guzmán Loera negó haber otorgado facultades a ambos para encabezar su defensa jurídica en nuestro país. Dicho poder, en el caso de Badillo Soto, se limita a dirimir pleitos y cobranzas, actos de administración y dominio, según un acta notariada fechada en el año 1996, con sede en Tonalá, Jalisco. “En el caso, este órgano jurisdiccional considera procedente desechar de plano la demanda de amparo, al actualizarse la causal de improcedencia prevista en la fracción XXIII del artículo 61, en relación con el numeral 6º de la Ley de Amparo”, se lee en una notificación difundida en el portal del Consejo de la Judicatura Federal, y por el cual se sobreseyó el juicio de amparo. El sobreseimiento, por otra parte, derivó de la devolución del caso que hizo la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) hacia dicho juzgado, luego de que el éste declaró infundado el recurso de queja interpuesto por Badillo Soto y González Meza en contra de la extradición del capo sinaloense hacia los Estados Unidos, con la autorización de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). Al analizar el caso y los antecedentes del mismo, el Juzgado Decimotercero de Distrito encontró un escrito fechado el 16 de junio del 2016, mediante el cual El Chapo desconoció su supuesta representación. Escribió el capo: “vengo a solicitar se tenga por no interpuesta la demanda de amparo promovida por los señores Licenciados Juan Pablo Badillo Soto y José Luis González Meza, contra la orden de extradición dictada en mi contra por la Secretaría de Relaciones Exteriores. “En la especie el presente juicio de amparo lo promovieron los señores licenciados Juan Pablo Badillo Soto y José Luis González Meza, ostentándose como defensores del suscrito, RERESENTACIÓN DE LA CUAL CARECEN”, añadió. El pasado 28 de agosto la primera sala de la SCJN desechó el recurso de queja interpuesto por la supuesta defensa de Guzmán Loera, al considerarlo “improcedente”. Previamente su defensa presentó en México un recurso de queja en nuestro país al amparo en revisión 146/2019, mismo que fue desistido por el Quinto Tribunal Colegiado en Materia Penal con sede en la Ciudad de México. El caso fue atraído por la SCJN desde el pasado 27 de febrero, cuyo proyecto de sentencia fue elaborado por el ministro Jorge Pardo Rebolledo. Entonces, la defensa de Guzmán Loera argumentó errores en la integración de los expedientes. Una de ellas, consiste que las cortes del Distrito Sur de California y del Distrito Oeste de Texas fueron las que solicitaron su extradición, no la de Brooklyn, y sus solicitudes fueron formalizadas una vez que el capo pisó suelo estadounidense. Sus abogados también trataron de revirar las consecuencias del juicio en la Corte de Brooklyn en la SCJN, sabiendo los alcances del juicio que se extendió durante varios meses, argumentando que la cadena perpetua es una sanción excesiva y anticonstitucional por las leyes en México. El alegato de la solicitud de atracción por el Alto Tribual fue desechado el pasado 12 de marzo, aunque los expedientes de origen –recurso de revisión 1/2019 y el recurso de queja 209/2018– ya habían sufrido reveses desde febrero pasado.