CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una serie de cuestionamientos a los partidos de oposición, en particular por su postura respecto a su propuesta de combatir facturación falsa y empresas fantasma, fue planteada hoy por el presidente Andrés Manuel López Obrador. En su conferencia de prensa matutina, el mandatario abundó en prácticas de corrupción que, consideró, tiene molestos a sus adversarios. Y es que, a lo largo de su conferencia de prensa de este lunes, López Obrador se refirió, como hace con frecuencia, a sus adversarios y opositores, en particular a la resistencia a aprobar una reforma para evitar las facturas falsas y las empresas fantasma.

“Oposición que no le gusta que se sancione estos ilícitos”, dijo.

El mandatario mencionó que hay mucha evasión fiscal por ese tipo de facturación. Recordó que en muchos casos aparecieron reportajes que demostraban que una empresa financió una campaña política pero que al verificar el domicilio era una casa modesta donde sus moradores a veces ni sabían que ahí era un domicilio fiscal.

“Tenemos que terminar todo eso, porque significa entre otras cosas, evadir impuestos, menos recaudación y el gobierno tendría que aumentar impuestos, crear nuevos. El pensamiento, la concepción predominante en estos conservadores corruptos, tecnócratas, neoliberales… era que había que cobrar más impuestos”.

Se refirió también a la Reforma Fiscal que significó que la gente se apretara el cinturón. La diferencia es que ahora el que se aprieta el cinturón es el gobierno.

“Salían con el cuento de que era muy poco lo que se recaudaba en México con relación a otros países y por lo mismo, había que aumentar los impuestos. Pero en el supuesto de que fuese así, lo primero que tendría que hacer el gobierno es dar el ejemplo de una administración honesta, eficiente, sin derroche. “Y después, si no alcanza, ver la posibilidad de que haya más contribuciones”.

Añadió que esas políticas eran injustas y que su administración plantea un cambio para que el gobierno sea el que se apriete el cinturón.