CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un jurado de Nueva York determinó que Juan Antonio Tony Hernández, hermano del presidente hondureño Juan Orlando Hernández, formó parte de una red de narcotráfico con vínculos en México y Colombia, y lo declaró culpable de otros cargos como portación ilegal de armas y mentiras ante las autoridades. La Corte de Distrito Sur de Nueva York dará su sentencia el próximo 17 de enero, la cual podría desembocar en una condena de cárcel superior a los 30 años. A lo largo del juicio, el cual causó mucho revuelo en Honduras, se sucedieron cuatro narcotraficantes confesos quienes hundieron a Tony Hernández y enseñaron las profundas raíces de las redes criminales y de corrupción en el país centroamericano; ello llevó los fiscales a tacharlo como “narco-Estado”. El pasado 2 de octubre los fiscales afirmaron por ejemplo que Joaquín El Chapo Guzmán, entonces líder del Cártel de Sinaloa –el cual mostró ayer su fuerza de fuego en Culiacán--, entregó un millón de dólares al acusado en 2013 para financiar la campaña de su hermano hacia la presidencia. A través de su cuenta de Twitter, el presidente Juan Orlando Hernández reaccionó negó reiteradamente las acusaciones vertidas en Nueva York: ayer, rechazó que Honduras sea “un Estado que patrocina el narcotráfico o es un narco-Estado”, y hoy deploró la decisión del jurado y rechazó “cualquier falsa e irresponsable versión que busca manchar el nombre de Honduras”. También publicó en sus redes sociales un video de propaganda en el cual afirmó que Washington reconoció la labor de su gobierno contra el narcotráfico. Tony Hernández fue detenido en Miami el pasado 23 de noviembre; tres días después, la fiscalía estadunidense afirmó ante la corte de Nueva York que el hermano del mandatario “estuvo involucrado en cada etapa del tráfico de múltiples toneladas de cocaína a través de Honduras y con destino a Estados Unidos”, y ello al menos entre 2004 y 2016.