CIUDAD DE MÉXICO (apro). - La polarización en las narrativas políticas y económicas representa un serio riesgo para la autonomía de la banca central, afirmó el gobernador del Banco de México (Banxico), Alejandro Díaz de León. "La autonomía de la banca central enfrenta nuevos desafíos. Hemos sido testigos de una polarización en las narrativas económicas y políticas lo mismo en economías avanzadas que emergentes como resultado de profundas y complejas transformaciones", dijo durante su participación en la celebración del 25 aniversario de la autonomía del Banxico. Entre ellas, explicó, se encuentran la inserción de las economías con abundante mano de obra en un mundo globalizado, los costos directos e indirectos de la gran crisis, la revolución de las tecnologías y la creciente brecha entre las expectativas de los ciudadanos y las oportunidades de desarrollo que, juntas, han sido un campo fértil para políticas públicas con horizontes a corto plazo, como el proteccionismo y las tensiones comerciales. Este entorno, prosiguió, ha sido campo fértil para políticas públicas con horizontes de corto plazo, como el proteccionismo y las tensiones comerciales. Por eso, dijo que las instituciones con objetivos de largo plazo, tanto multilaterales como nacionales encaran mayores y nuevos retos. Ante este panorama, Díaz de León señaló que los bancos centrales deben buscar la forma de cumplir sus objetivos y de comunicar el impacto eficaz que tienen su mandato, condición de autonomía y acciones sobre el bienestar de los ciudadanos y en sus posibilidades de desarrollo. Además, subrayó la importancia que ha tenido esta condición, misma que calificó como idónea para alcanzar su mandato prioritario de mantener una inflación baja y estable, a fin de promover un desarrollo más dinámico sostenible y equitativo. "La modificación constitucional que hace 25 años confirió autonomía al Banxico puede considerarse como una de las reformas económicas más importantes en la historia contemporánea de México que merece ser preservada para las siguientes generaciones", indicó. En su discurso, el funcionario aseveró que La autonomía de Banxico ha mostrado sus ventajas como un medio eficaz para que la banca central provea a la sociedad con importantes bienes públicos. Sin embargo, reconoció que la autonomía no es un tema concluido, sino una condición que debe responder continuamente a nuevos retos. Por ejemplo, explicó que, a partir de la crisis financiera de 2008, además del objetivo prioritario de la estabilidad de precios, los bancos centrales han renovado su papel en la prevención, detección y mitigación de riesgos para la estabilidad del sistema financiero. De igual manera, la banca central debe reaccionar con agilidad ante los cambios que el avance tecnológico propicia en la configuración de los servicios financieros. Agregó que los argumentos en pro de un banco central autónomo se han reforzado considerando los costos para la sociedad, tanto de no contar con estabilidad de precios, como los asociados a las crisis financieras.