CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Los esfuerzos de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos no han podido contener el pánico de los inversionistas. Esta mañana Wall Street inició jornada en caída libre. El Dow Jones abrió con caídas del 9%, mientras el S&P bajaba un 7% y el Nasdaq un 6%, por lo que se detuvo la actividad durante 15 minutos por tercera vez en apenas una semana. La medida excepcional es para evitar las ventas de pánico, que se ha producido ya tres veces en las últimas seis sesiones. La nueva caída ocurre luego de que el banco central estadunidense decidió el domingo por la tarde, horas antes de la apertura del mercado, recortar los tipos hasta el rango del 0% y el 0,25%. Con esta medida la política monetaria regresó a la casilla de salida de diciembre de 2015, cuando empezaron a aplicarse subidas paulatinas para dejar atrás la crisis financiera. Además, la Fed ha anunciado que invertirá 500 mil millones de dólares en la compra de bonos del Tesoro y otros 200 mil millones en valores hipotecarios, junto con una acción coordinada con otros grandes bancos centrales para aportar liquidez en dólares. Pese a esas medidas, las consecuencias de la pandemia del Covid-19 han resultado devastadoras y de difícil gestión por parte de las autoridades monetarias. La situación ha detenido de manera brusca el ritmo alcista de Wall Street, el más largo de la desde marzo de 2009 y que acabó la semana pasada cuando los tres índices de referencia acumularon caídas del 20% desde los máximos de febrero. La pandemia de Covid-19 se sigue extendiendo en Estados Unidos donde ya suman tres mil 500 afectados. Nota relacionada: Desplome activa paro de emergencia en Wall Street