Personal médico, desarmado para enfrentar el Covid-19
CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- En plena fase 2 y con la inminente llegada a la siguiente etapa en que miles de personas se contagiarían de Covid-19, personal médico de instituciones públicas de salud, federales y estatales en el país protestaron porque les falta lo mínimo indispensable para enfrentar a la pandemia.
Denuncian que no cuentan con un protocolo para detectar en el ingreso de hospitales a personas con enfermedades respiratorias, gel antibacterial, guantes ni cubrebocas.
En la mayoría de los estados, la estrategia federal y estatal para enfrentar la contingencia es no dar atención a los contagiados por coronavirus en todos los hospitales o centros de salud, sino canalizarlos a determinados nosocomios o áreas habilitadas para ello. Sin embargo, la población acude a atenderse al lugar de salud más cercano, refieren los inconformes.
Es por esto que entre el 20 y el 27 de marzo, personal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), de al menos diez estados, entre ellos, Morelos Veracruz, Tabasco, Yucatán, Jalisco, Guanajuato, Puebla, se manifestó al unísono para exigir equipo de protección y material.
En Colima, además, empleados del ISSSTE del Hospital Regional de la Secretaría de Salud y Bienestar Social (SSBS) que depende del estado se inconformaron.
En Veracruz, empleados del IMSS y del ISSSTE no sólo se inconformaron por la falta de material, sino de médicos residentes quienes dejaron de laborar por el recorte presupuestal del año pasado.
En la clínica 10 y 66 de Xalapa, médicos y enfermeras “pararon labores” delante de la prensa para denunciar que se han cansado de pedir a “la delegación” (sic) las herramientas necesarias para enfrentar la pandemia, señalaron que pasaron dos semanas y “no tenemos respuesta”.
En el hospital del ISSSTE en Xalapa el personal médico amagó con cerrar las instalaciones sí no eran “dotados a la brevedad” de material de protección.
Para acallar a los inconformes, los directivos se comprometieron a entregarles el equipamiento.
Sin embargo, médicos del IMSS de la clínica 110 donde falleció la primera víctima en Jalisco, aseguraron que la entrega fue para poco personal, cuando todos están expuestos.
Recordaron que el hombre, de 55 años, que murió en su clínica, -adquirió la enfermedad en Nueva York-, ingresó el día 20 de marzo, al área de primer contacto donde fue atendido por una interna de pregrado, una residente y el médico de base quienes no contaban ni con cubrebocas. Tras interrogarlo se percataron de su enfermedad, se aisló y a las dos horas murió.
Un familiar del occiso fue atendido en el Hospital Regional Valentín Gómez Farías del ISSTE donde también falleció a causa del coronavirus. En ese nosocomio, tampoco cuentan con el material necesario para atender a ese tipo de contagiados, aseveran los médicos consultados.
El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro presumió que para hacer frente a la pandemia anunció el 20 de marzo, que en la zona metropolitana se atenderán a los enfermos en el Hospital General de Occidente –conocido popularmente como Zoquipan- en la creada área de Covid-19.
Ahí, dijo, se invirtió 233 millones de pesos en 75 ventiladores e igual número de monitores, así como en material de limpieza e higiene y equipo de protección.
El lunes 23 al visitar el área de Covid-19 en la noche, se encontró que solo había dos personas para atender a los pacientes, una enfermera y una médico, y que el bote con gel antibacterial lucía vacío.
También, se acudió al área de urgencias de adultos del mismo nosocomio, un médico comentó que llevaba tres días usando el mismo cubrebocas, cuando se recomienda utilizarlo un máximo de tres horas, y no había gel.
En seis centros de salud de la zona metropolitana de Guadalajara y del interior del estado a los que se acudió, personal médico se quejó por la falta de gel, cubrebocas y guantes.
En el Hospital de la Mujer que se ubica en Guadalajara, una vigilante se encarga de tomar la temperatura a los usuarios, pero de acuerdo con el personal, a todos les marca 34°, debido a que no funciona el aparato.
En los Hospitales Civiles de Guadalajara, Fray Antonio Alcalde y Juan I. Menchaca se habilitaron dos áreas para tratar a los pacientes con coronavirus. Según su director, Jaime Andrade cuentan con insumos y personal capacitado. Pero, enfermeras consultadas señalaron que solo les dan un cubrebocas por día, y no hay suficiente personal.
Una estudiante de enfermería reveló que en el Fray Antonio Alcalde a compañeros que provienen del interior del estado los están obligando a quedarse para atender a pacientes con coronavirus, si se niegan, perderían los sietes meses que han acumulado de prácticas. Les pidieron traer mascarilla N95, no la consiguieron, y les dijeron que entonces usen tres cubrebocas, ya que equivale a lo mismo.
En Oaxaca, el 26 de marzo, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSSA) Sección 35, reclamó mediante un escrito al gobernador, Alejandro Murat Hinojosa que se incumplió con la capacitación, insumos, medicamentos y equipo necesario en todas las unidades médicas para atender a enfermos de Covid-19, a la que se había comprometido 13 días antes.
Advirtió el SNTSA, que si continúan las mismas condiciones tomarían otras acciones, puesto que deben privilegiar la salud e integridad de sus agremiados.
En Chiapas, María de Jesús Espinosa de los Santos, la lideresa de la Sección 50 del SNTSSA, señaló que el sistema estatal de salud pública está prácticamente desmantelado desde hace dos sexenios, y que carecen de insumos y medicamentos en la mayoría de los Hospitales y Centros de Salud del estado de Chiapas.
Detalló que el desabasto se presenta en los Hospitales, Gilberto Gómez Maza y Regional, así como los centros de salud de las colonias Bienestar Social, Santa Cruz, Albania, San Agustín, todas estas en la capital del estado.
También existe crisis de equipamiento e insumos en los hospitales y centros de salud de Malpaso, los Hospitales Básicos Comunitarios y Centros de Salud de Cintalapa, de Jiquipilas, Totolapa, Copoya, Soyaló, Berriozabal y Acala, Chiapa de Corzo, Ocotepec, Chiapilla, Terán, Suchiapa, Tecpatán, San Fernando, Venustiano Carranza.
En tanto, el Secretario de Salud en Chiapas, José Manuel Cruz Castellanos sostuvo lo contrario que cuentan con lo necesario para hacer frente al escenario que vive la entidad por la pandemia del coronavirus Covid-19, como son reactivos de laboratorio, equipos de protección para el personal y gel antibacterial.
Sin embargo, Cruz Castellanos precisó que los medicamentos, están en bodegas, conforme se necesiten se liberará, y que los insumos se distribuirán a las unidades de salud, hasta que se esté en “el segundo escenario”, y que se dio capacitación a 11 mil trabajadores de salud.
María de Jesús Espinosa advirtió que de no existir una coordinación entre el sector laboral y las autoridades, la pandemia podría provocar una tragedia sanitaria en Chiapas.
En Campeche, ante la pasividad de la autoridad en el tema del coronavirus, asociaciones de médicos por iniciativa propia, solicitaron a la población donar dinero a la cuenta del proveedor que entregará equipos de bioseguridad al personal de salud expuesto al virus.
Aunada a la poca respuesta de la autoridad para atender la pandemia, Campeche cuenta con menor presupuesto en materia de salud, en 2015, tenía casi 587.3 millones de pesos, para este año solo hay poco más de 363 millones. Los recursos se de salud se canalizaron a la partida de la oficina del gobernador –los primeros cuatro años fueron encabezados por Alejandro Moreno Cárdenas, y ahora su sustituto es Carlos Miguel Aysa González-- y del secretario general de gobierno.
En Tabasco, mientras las autoridades manifiestan que están preparadas para la contingencia, el gobernador, Adán Augusto López, salió positivo de Covid19.