CUIDAD DE MÉXICO (apro).- Uno de los músicos mexicanos de mayor reconocimiento en el rock duro es Erk Aicrag, quien con su banda Rabia Sorda ha sabido forjarse un camino dentro y fuera de México. Por ello en tiempos de la pandemia por el covid-19, el músico radicado en Alemania afirma en entrevista con Apro vía Skype: “La creatividad tiene que ser incesante, además de escudriñar hacia nuevas fórmulas para acercarse a la gente (…) a industria no va a volver a ser igual, pero van a venir cosas diferentes y nuevas, seguirá viva”. Detalla que de momento Rabia Sorda --agrupación germano-mexicana formada en 2003 que goza de aceptación en Europa, al igual que su paralela Hocico, surgida del underground de la Ciudad de México en 1993--, solamente promociona su música vía redes sociales con el sencillo intitulado “Destruye”, el cual formará parte de lo que será su próximo material discográfico al lado de Marcus Engel en la guitarra y teclados, así como Maxx Lucas en la batería. Respecto a la situación del gremio artístico en nuestro país, el músico lamenta que no existan apoyos económicos, no obstante, resalta que el ingenio llevará a los espectáculos hacia una buena senda: “En Alemania sí hay apoyos, por lo menos tienes para tus alimentos. En México dudo que haya un apoyo de esa manera, pero las crisis ayudan a crecer, tiene un lado positivo para tratar de reconstruirse. Cuando empezó Hocico vimos que no había apoyo a la cultura por parte del gobierno, entonces tienes que joderte y sufrirle para lograr lo que quieres”. Por ello insta a los músicos en encontrar un remanso en la creatividad para superar este episodio desatado por el covid-19: “Resistan, en el mundo artístico tenemos que seguir activos, sean fuertes, todos tenemos necesidades, no dejen morir la creatividad, esta crisis del virus será una más, pero debemos aprender de esta circunstancia”.

“Destruye”, una terapia de rock duro contra las drogas

La rola intitulada “Destruye” narra el dolor de ver a alguien muy cercano consumirse en el abuso de las drogas, en una ráfaga de acordes ásperos entre rock duro, punk, metal, dosis electrónicas e industriales. Rabia Sorda define el corte como una “bomba atómica de sonidos” que hace uso de todos los recursos musicales de cada integrante para desprender una canción extrema bajo una melodía hechizante. “Es una terapia en la situación de las drogas. En este caso es alguien cercano a mí, para incitarlo a que hay que crear algo nuevo y puedes moverte. “Yo crecí en un ambiente de adicciones en colonias populares, pero busqué una forma de explorar mis emociones en la música y tener una visión positiva. Mi droga es estar en el escenario, donde no hay pensamientos, toda la energía fluye si la gente está conectada, cualquiera que experimenta el arte en el escenario sabe que es una droga y ahorita muchos darían cualquier cosa por estar ahí, de compartir con la gente esa pasión”. De cualquier modo Erk Aicrag añade que está en pro de la regulación de la mariguana y considera que existen drogas que perjudican más a las personas: “¿Por qué no hacerla legal?, el tabaco tiene más sustancias que hacen daño y el alcohol. Regular la mariguana es lo mejor que nos puede pasar, la prohibición es lo que más atrae a la gente”. Nota relacionada: Promotoras de espectáculos proponen “auto-conciertos” para reactivar el entretenimiento