OAXACA, Oax. (apro).- El legislador priista Gustavo Díaz Sánchez presentó a la Diputación Permanente del Congreso local un punto de acuerdo para crear una fiscalía especial que investigue los crímenes de Alexander Martínez Gómez, de 16 años, y Diego Eruviel Luna, de 20, a manos de las policía municipales de Acatlán de Pérez Figueroa, en la Cuenca del Papaloapan, y San Pablo Huitzo, en los Valles Centrales de Oaxaca. La fiscalía especializada tendría la tarea de esclarecer y deslindar las responsabilidades penales que correspondan en ambos casos, y otros donde se denuncie abuso policial, justificó el presidente de la Comisión de Seguridad y Protección Ciudadana, quien ha sido cuestionado por sus presuntos vínculos con grupos delictivos en la Cuenca del Papaloapan. Díaz Sánchez argumentó que en la entidad el abuso policial es una constante, tal como lo ha registrado la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, que durante 2019 recibió mil 344 quejas contra autoridades municipales, de las cuales 256 estuvieron relacionadas con violaciones a los derechos humanos cometidas por policías municipales y topiles (policías comunitarios). Nota relacionada: Vinculan a proceso al policía acusado de la muerte de Alexander El priista pidió que la Fiscalía General del Estado de Oaxaca investigue de manera exhaustiva las muertes vinculadas con la actuación de los policías de San Pablo Huitzo y Acatlán de Pérez Figueroa. Asimismo, resaltó la necesidad de analizar el registro de armamento y equipo policial, toda vez que cualquier persona que ejerza funciones de seguridad pública sólo puede portar las armas que le hayan sido autorizadas, de conformidad con la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. En el exhorto detalla que el pasado 7 de mayo dos jóvenes fueron detenidos por elementos de la policía municipal de San Pablo Huitzo y habrían sido entregados a civiles para ser torturados. Como consecuencia, se registró el fallecimiento de Diego L. P. (carpeta de investigación 14932/FVCE/ETLA/2020). Juan Jaciel Luna Paz sobrevivió y narró la forma en que la policía los entregó a un grupo que los torturó y mató a su hermano. Un mes después, el 9 de junio, en la agencia municipal de Vicente Camalote, en el municipio Acatlán de Pérez Figueroa, Alexander M. G. fue privado de la vida y Carlos R. S. resultó herido, presuntamente a manos de un policía municipal. Por este hecho, la Fiscalía de Oaxaca inició la carpeta de investigación respectiva.