REYNOSA, Tamps. (apro). - Maki Ortiz Domínguez, alcaldesa panista de Reynosa, se deslindó este lunes de las acusaciones de Emilio Lozoya Austin de supuestos sobornos que habría recibido cuando era senadora por Partido Acción Nacional. Ortiz Domínguez, quien integró por Tamaulipas la Cámara Alta del 2012 al 2016, respondió en redes sociales a un señalamiento, de fuente no dada a conocer, que dijo que ella recibió dinero de quien fuera director de Pemex y quien hoy es procesado por actos de corrupción. En el post acusador que la misma panista difundió ese lunes por la tarde, se señala: “Emilio Lozoya declaró que Maki Ortiz recibió 1.8 millones de pesos por votar a favor cuando fue senadora. El caso Lozoya sigue sacando a la luz a más políticos involucrados en este escándalo de sobornos hacia diputados y senadores”. https://twitter.com/MakiOrtizD/status/1295417149360660488 El mensaje, que se remite a fuentes “extraoficiales”, dice que existe un video de 19 minutos que ya fue proporcionado a las autoridades y que muestra “una plática” con la entonces senadora y hoy presidenta municipal de esta ciudad fronteriza. La publicación tiene adjuntas fotografías de Lozoya, con los ojos cubiertos, por ser un procesado, y a la alcaldesa. Al respecto, Ortiz Domínguez señaló que ni siquiera conoce al exdirector de la empresa productora del estado mexicano. “Los difamadores de siempre ponen en una página que yo recibí dinero a cambio de votar a favor de la Reforma Energética, mienten! Ni conozco al Sr. Lozoya y niego rotundamente haber recibido algo por votar a favor o en contra de cualquier reforma o instrumento legislativo”, dice textualmente el apunte de la edil. Ortiz se desmarca de los señalamientos precisamente este lunes cuando se difundió ampliamente un video en el que se observa al exsecretario técnico del senado Rafael Caraveo mientras recibe paquetes de dinero en efectivo de parte de un supuesto funcionario de Pemex. También aparece Guillermo Gutiérrez Badillo, quien era trabajador del senado y que, hasta este lunes, era secretario particular del gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez. Se cree que ese dinero fue repartido por Lozoya a legisladores para que aprobaran la reforma energética en el pasado sexenio de Enrique Peña Nieto.