CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Responsable por más de cuatro décadas de la Osteoteca del Instituto Nacional de Antropología e Historia (
INAH), el antropólogo físico José Concepción Jiménez López falleció este sábado 29 de agosto.
Así lo dio a conocer el propio instituto, a través de un comunicado en el cual definió al especialista como “un hombre de ciencia, comprometido con el estudio de los poblamientos del ser humano temprano en nuestro país y en el continente americano”.
Nacido el 8 de diciembre de 1949, fue investigador durante más de 30 años en la Dirección de Antropología Física, y creador en 2002, junto con el también antropólogo físico Antonio Pompa, del Simposio Internacional “El Hombre Temprano en América”, que se lleva a cabo en México, y se realizó en 2010 en Argentina y en 2012 en Colombia, con la participación de estudiosos de la antigüedad y de la evolución del hombre de diversas partes del mundo.
Se encargó de resguardar el tesoro óseo que se conserva en los sótanos del Museo Nacional de Antropología (MNA), “donde pasó horas escudriñando los secretos que esconden los más de 30 mil huesos”, dice el INAH y añade que fue el promotor de que ese valioso acervo “tuviera un espacio digno para su estudio, investigación, conservación y difusión”.
Organizó la exposición itinerante
Momias. Ilusiones de vida eterna, presentada inicialmente en el Museo de El Carmen, ubicado en San Ángel. Y dio forma a la “más importante colección de dientes mutilados e incrustados en el mundo”. Y fue comisionado para organizar la colección especial de restos precerámicos, los más antiguos de la Cuenca de México, y para llevarlos a fechar al Reino Unido, luego de lo cual se incorporaron al discurso museográfico del MNA.
Mediante el comunicado del INAH, la historiadora Marcela Salas, compañera de Jiménez López por cuarenta años, lo definió como “una extraordinaria persona, gran compañero y un investigador profesional y generoso con el conocimiento e información que manejaba”.
