PUEBLA, Pue. (apro).- Con el gobierno de Miguel Barbosa Huerta, Puebla vive como en las peores épocas del “priismo recalcitrante”, pues lo que hasta ahora se ha visto en su administración son las mismas prácticas y vicios del viejo régimen, acusó el diputado federal Fernando Manzanilla Prieto. En un video publicado en sus redes sociales, el también vicecoordinador de la bancada del Partido Encuentro Social (PES) y quien en su momento fungió como operador político del ahora gobernador, sostuvo que en los comicios de 2018 los poblanos votaron por un cambio que dejara atrás “el abuso y uso arbitrario del poder”, pero con Barbosa –dijo-- se vive “más de lo mismo”. Indicó que con el triunfo de la Cuarta Transformación Puebla esperaba que se recuperara la confianza en la autoridad, se fortalecieran las instituciones democráticas locales, se diera una auténtica división de poderes y el respeto a su autonomía, pero sobre todo se viviera un auténtico estado de Derecho. “Desafortunadamente con Miguel Barbosa vivimos como en las peores épocas del priismo recalcitrante. Lo que hemos visto hasta ahora es más de lo mismo de siempre, los mismos viejos vicios, las mismas viejas prácticas, la misma soberbia o peor, y el mismo desprecio a la legalidad”, expresó el legislador. Reportaje especial: El gobierno de Barbosa en Puebla: un año de pleitos y dislates Como ocurrió en otros gobiernos, se pretende utilizar la fuerza del Estado para “amedrentar y someter”, y para estigmatizar a quienes el gobernante considera incómodos, a quienes critican, evidencian decisiones equivocadas, a quienes considera adversarios políticos, denunció. Y reclamó: “El uso de las instituciones de administración y procuración de justicia con fines políticos es algo que se tiene que acabar”. De acuerdo con Manzanilla, un verdadero cambio de régimen implica hacer las cosas de manera diferente. “El verdadero compromiso con un cambio de régimen implica como lo ha hecho Andrés Manuel López Obrador al ejercer el poder de manera diferente; aferrarse a viejas prácticas semi autoritarias es seguir en el pasado, cuando lo que requerimos, y más en este momento, es un liderazgo con visión de futuro”. Los señalamientos de Manzanilla ocurren luego de un nuevo desencuentro entre el legislador y el mandatario, la semana pasada. Barbosa reveló que su gobierno había presentado ante la Fiscalía General del estado una denuncia contra exsecretarios de Gobernación y de Finanzas de anteriores administraciones, entre los cuales se encuentra Manzanilla, por supuesta malversación de una llamada “partida secreta”. Ese mismo día, a través de sus redes sociales, el diputado federal hizo público que, a su paso por la Secretaría de Gobernación, durante el gobierno interino, la mayor parte de esa partida secreta se entregó al equipo de transición del mismo Barbosa Huerta tras las elecciones de 2019. Incluso exhibió un recibo firmado por David Méndez Márquez, actual secretario de Gobernación del estado, por un millón y medio de pesos entregados el 5 de julio de 2019 para la organización de un “Congreso Progresista”, un evento partidista al que asistieron Yeidckol Polevnsky, entonces dirigente de Morena, y el exlíder perredista Cuauhtémoc Cárdenas. Barbosa arremetió de nuevo contra Manzanilla, a quien dijo que deberá rendir cuentas ante la Fiscalía y lo acusó de cometer otro delito por haber sustraído el recibo que hizo público. En una reciente entrevista a un medio local, el gobernador reveló que llegó a considerar a Manzanilla como su “proyecto” para la sucesión, pero el rompimiento entre ambos se había generado cuando se percató que trataba con “adversarios y mis enemigos” y “se metía en la vida de los partidos políticos”. El ahora diputado federal fue uno de sus principales operadores en las elecciones de 2018. Posteriormente fungió como secretario general de Gobierno en el mandato interino, y se mantuvo en ese cargo en los primeros meses de la actual administración. A partir de su salida de la Secretaría de Gobierno, el 14 de enero, el mandatario poblano lo ha acusado públicamente de formar parte de la llamada “banda de conejos”, donde se unen los que supuestamente buscan atacar y boicotear a su gobierno.