CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador atajó las críticas al formato de su informe como un resumen de las “mañaneras”, con buen ánimo.
“A lo mejor tienen razón”, dijo.
Colección de frases pronunciadas con frecuencia, referencias reiteradas, datos más o menos dados a conocer en los últimos meses y hasta el reproche a sus “adversarios”, marcaron ayer el mensaje presidencial con motivo del Segundo Informe de
Gobierno que constitucionalmente, se entrega cada 1 de septiembre.
“Algunos opositores dijeron que no había nada nuevo en el Informe, que era como una mañanera… a lo mejor tienen razón, porque informamos todos los días. Antes, un presidente no informaba y estaban a la espera de noticias espectaculares, si se daban”, expresó con buen ánimo.
En su conferencia de prensa de hoy en Palacio Nacional, López Obrador afirmó que en su mensaje refrendó los principios de su gobierno y añadió:
“No hemos dejado de avanzar (a pesar de la pandemia) en el propósito de transformar al país, se nos presenta esta situación difícil, pero seguimos combatiendo la corrupción, seguimos con nuestro programa de progreso con justicia, haciendo obras públicas, creando empleos, no nos desviamos”.
Admitió que hay objetivos que han resultado difíciles, como la descentralización de las secretarías de Estado que dijo, no ha podido concretar porque debían actuar sin contratiempos ante la pandemia.
El mandatario reiteró, como expuso ayer en su informe, que ha cumplido 95 de los 100 compromisos que asumió el primer día de su gobierno y se dijo esperanzado en poder cumplir la totalidad antes del 1 de diciembre, fecha que se autoimpuso como límite para “sentar las bases” de la transformación.
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