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Pemex, tras la reinvención de sus finanzas

Cuando Andrés Manuel López Obrador dio su primer discurso como Presidente de México en el Zócalo, ese 1 de diciembre de 2018, uno de los puntos que destacó como eje de su gobierno fue el de la recuperación de la industria energética nacional.
lunes, 6 de junio de 2022 · 16:33

Cuando Andrés Manuel López Obrador dio su primer discurso como Presidente de México en el Zócalo, ese 1 de diciembre de 2018, uno de los puntos que destacó como eje de su gobierno fue el de la recuperación de la industria energética nacional.

“Vamos a destinar mayor inversión pública para producir con urgencia más petróleo, gas y energía eléctrica y así enfrentar la crisis que dejaron los políticos neoliberales”, expresó.

En ese mismo discurso hizo un llamado a los técnicos y obreros petroleros, en activo o jubilados, “para actuar con patriotismo como se hizo en los tiempos del general Lázaro Cárdenas, y a que volvamos a rescatar la industria petrolera nacional”.

En esos días, Pemex estaba con una producción en caída que alcanzaba los 2 millones de barriles diarios de hidrocarburos líquidos; debacle que se profundizó en 2020, cuando la producción cayó hasta 1.91 millones de barriles diarios.

El Plan de Negocios 2019-2021 de la petrolera estableció “un periodo de transición de tres años. El primer año estuvo dedicado a resolver los problemas estructurales y sentar las bases de una nueva política de gestión operativa y financiera de PEMEX”. A partir de 2020, consolidar esas iniciativas para alcanzar, en el año 2021, el equilibrio financiero, de acuerdo con la empresa.

A partir de 2019, una de las maniobras destacables fue la renegociación de deuda por 36 mil millones de dólares. Con ello, la deuda financiera total disminuyó 4.8% comparada con el cierre de 2018, debido principalmente al prepago que se llevó a cabo como parte de la operación de manejo de pasivos en septiembre de 2019. Al 31 de diciembre de 2019, el tipo de cambio se ubicó en MXN 18.8452 por USD 1.00, por lo que la deuda financiera registró MXN 1,983.2 mil millones, o USD 105.2 mil millones.

No obstante, llegó la pandemia y el peso se depreció, además de que la caída en la economía mundial pegó duramente en los ingresos de la petrolera que vio incrementar su deuda de corto plazo, dando como resultado un aumento de 13.9% en pasivos durante 2020, comparada con el cierre de 2019. Al 31 de diciembre de 2020, la deuda financiera registró MXN2,258.7 mil millones, o USD113.2 mil millones.

A finales de 2021, la Secretaría de Hacienda anunció una aportación patrimonial por 3,500 millones de dólares a la empresa, además de reducir la carga fiscal, en específico el Derecho de Utilidad Compartida (DUC) para reducirlo de 52% a 40 por ciento.

Ese año, la deuda financiera total disminuyó en 0.7% comparada con el cierre de 2020, registrando un saldo de MXN 2,243.7 mil millones, o USD 109 mil millones.

El nuevo Plan de Negocios de Pemex 2021-2025 tiene cuatro aristas en cuanto al manejo de pasivos y saneamiento de finanzas: diversificar la base de inversionistas, mejorar la liquidez y la profundidad, optimizar la estructura del perfil de vencimientos, y diversificar el portafolio a costos competitivos para darle mayor flexibilidad financiera a la petrolera.

Por ello, el reciente anuncio de intercambio de deuda comercial por financiera ofrecido a sus proveedores y contratistas, se encamina en esa dirección: “Pemex analizará y, de ser el caso, estructurará nuevos esquemas de financiamiento distintos a los tradicionales, aprovechando su papel relevante en los mercados financieros”.

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