Junio no ha sido uno de los mejores meses en México para las familias. A la inflación superando el 9% en el país vecino, lo que indirectamente afecta a la economía del país centroamericano, se suma un dato que está poniendo en jaque la economía doméstica: la subida de más de un 12% de la cesta de la compra.

Alimentos y bebidas están sufriendo una subida exponencial que está haciendo que los ticket de la compra sigan al alza mientras que los salarios siguen estables, lo que está costando a muchas familias a la hora de cuadrar los fines de mes.

Tanto es así que muchos ya se plantean solicitar alguno de los préstamos personales online que existen en el mercado en busca de un respiro para reorganizar sus cuentas.

Páginas como LoanScouter facilitan esta labor gracias a aglutinar la información de los productos crediticios de los principales bancos y agencias de crédito. Gracias a esta información, los usuarios encuentran en una sola página los datos en lo que a tipos de interés, plazos de devolución y requisitos se refiere, sin necesidad de tener que estar navegando sitio a sitio.

En este sentido, la subida de la alimentación está afectando a todos los hogares puesto que van desde las leches, pasando por las tortillas de maíz o incluso por las frutas y verduras.

“El turismo, que empieza a acercarse a las cifras de antes del Covid, está suponiendo un alivio para algunos comercios de las zonas más comerciales. Esto ayuda también a los emprendedores que prestan sus servicios al sector y, por extensión, a sus familias, que llevan peleando casi tres años por estabilizar sus finanzas. Sin embargo puede que no sea suficiente si no se vienen medidas macroeconómicas que ayuden a afrontar toda la inflación” comentan.

Con un incremento medio del 8% en los precios, los mexicanos se enfrentan a un verano de cambios logísticos en los que poner en orden - de cara al otoño que prevé una desaceleración - las cuentas.

Para ello, la contención será clave, pero también lo será la inversión para conseguir posicionar al país como uno de los referentes en el continente americano a nivel logístico. Si gracias a su comunicación y puertos es capaz de hacerse con la recepción de mercancías del continente tanto asiático como europeo, podría usar su ubicación privilegiada para conseguir crear una red de hubs que permitiera dar servicio tanto a América latina como a Norteamérica.

Además, su posición privilegiada podría ser clave para crear una estructura de manufacturas capaz de responder a las necesidades reales de la demanda del continente desde la cercanía y facilidad para poder transportar, por vía terrestre incluso, los productos hasta sus destinos.

Hay que seguir de cerca la evolución de los precios de la materia prima para sacar partido a una situación que, de poder aprovecharse, crearía puestos de trabajo de calidad y permitiría salir de la presión fiscal y económica a cientos de miles de familias mexicanas.