Se tenía que decir y se dijo

sábado, 13 de abril de 2019 · 09:42
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Los fenómenos virales de internet en México siempre vienen acompañados de una cascada de notas que pretenden explicar su origen, las cuales en realidad son la misma: el dato que una descubrió, el resto lo copia sin rubor. Así ocurrió esta semana con el meme "Se tenía que decir y se dijo", convertido en la principal tendencia en Twitter durante buena parte del martes y, que consiste en la caricatura de un pollo amarillo que golpea la mesa al pronunciar cualquier sentencia categórica del tema que sea, y que cierra con la frase entrecomillada al principio del párrafo. En las notas explicativas se dijo -no sé si se tenía que decir- que ese enunciado fue una cita de algún jugador en el descontinuado videojuego Club Penguin y que el dibujo del pollo estaría inspirado en Kiiroitori, personaje asociado con el oso Rilakkuma, una franquicia japonesa de mercancías que van de peluches a accesorios, y que tiene ya una serie de dibujos animados próxima a estrenarse en Netflix. Lo que no se dice con precisión es quién comenzó la broma, una tarea que en Estados Unidos sí hace -o al menos intenta- el sitio Know Your Meme. El dibujo del pollo es atribuido genéricamente a "internautas", pero hay evidencia de que existía unos días antes de que el meme se viralizara mediante el hashtag #seteniaquedecirysedijo: es parte de un juego de Facebook de la marca Love App. desarrollado por la firma Fantastic App. En este entretenimiento aparece en el timeline el pollo amarillo con un símbolo de control de videojuego en el centro. Haciéndole click se puede participar. Aparece luego la pregunta "¿Cuál es tu 'se tenía que decir y se dijo?" y se pide seleccionar el género. En lo que se produce la respuesta, aparece un anuncio publicitario de un tercero. Ya que está la respuesta, el usuario puede elegir compartirla, repetir la experiencia para encontrar una respuesta mejor o simplemente dejarla pasar. El pollo es tan solo uno de decenas de acertijos ("quizzes") que ofrece Love App con preguntas o pruebas cuya respuesta, supuestamente, ajusta con el perfil del usuario participante. Uno de estos juegos se puso de moda el año pasado a raíz de la declaración del alcalde de Guanajuato, Alejandro Navarro Saldaña, quien se quejó de la llegada de turistas pobres a esa ciudad. Love App creó una "visa del estado de Guanajuato" en broma, según la cual se clasificaba al tipo de visitante, desde "fiestero" hasta "de élite". Y, por cierto, se dijo en su momento y se tenía que decir: este tipo de juegos recolectan datos de los usuarios. Y ahora hay que añadir: es el tipo de aplicaciones desarrolladas por terceros en los que Facebook ha demostrado carecer de control sobre los datos que recaban. Como se demostró apenas la semana pasada con el caso de Cultura Colectiva. A raíz de la aparición de notas en las que se acusaba a Love App de "robar" datos con el juego de la visa para Guanajuato, ésta emitió un comunicado en el que negaba categóricamente almacenar bases de datos de usuarios, aseguraba que sólo basaba su funcionamiento en el nombre, foto y género del usuario  y compartió entonces sus políticas de privacidad. En aquel entonces, el comunicado incluía una liga que llevaba a un archivo en Google Docs con las Políticas de Privacidad en español. Ahora que utilicé el juego del pollo, me aparecieron en inglés. Como sea, vale la pena tomarse un minuto para leerlas y no llamarse luego a sorpresa. Y es que, si bien Love App es enfático en asegurar que cumple con la normatividad en materia de uso de datos y se trata de una simple herramienta de entretenimiento, incluye un enlace a la configuración de privacidad de Facebook. Al hacerle clic, Facebook establece claramente los datos que obligatoriamente comparto con Love App: nombre y foto de perfil, sexo, nombres de mis amigos de Facebook y las conexiones de Messenger que también jugaron el juego, el idioma y la zona horaria desde donde interactúo. Tengo la posibilidad de borrar la aplicación, pero al hacerlo Facebook me advierte con una leyenda: "Love App ya no podrá solicitar información privada sobre ti en Facebook, pero es posible que aún tenga datos que compartiste anteriormente". ¿Para qué querrán toda esa información ? No sería mala idea que lo investigara el Inai, que diligentemente decidió actuar de oficio en el escándalo de Cultura Colectiva. A menos que se piense que detrás del pollo no hay más que un cándido e inocente juego. Se tenía que decir, y se dijo.

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