México, D F (apro)- Lo agentes secretos que visten de smoking y toman martinis secos, son cosa del pasado; lo nuevo serán los deportistas extremos, con tatuajes y poca clase Pobre James Bond "Triple X" ("XXX", EU, 2002), la nueva cinta del carismático actor Vin Diesel, es la primera de una serie de películas (franquicias, le llaman en Estados Unidos) que cuentan las aventuras de un agente secreto estadunidense llamado Xander Cage (Diesel), un deportista que practica deportes extremos (patineta, rafting, rapel, snowboard, paracaidismo y demás); casi casi vulgar y siempre viviendo al borde del peligro, Xander es algo así como un activista, situación que le mantiene al margen de la ley La ineficacia de los agentes de la vieja ola (elegantes y con buenos modales), obliga a Augustus Gibbons (Samuel L Jackson) a reclutar a gente distinta que se encuentre a la altura, o a la bajeza de los nuevos "supercriminales" Gibbons decide que de toda la escoria del país, Xander es el indicado para realizar el trabajo, por lo que es enviado, casi a la fuerza, a Checoslovaquia, para averiguar todo lo posible de Yorgi (Morton Csokas), un villano con planes para apoderarse del mundo Por supuesto, Xander, ahora apodado X, resulta ser más que un agente secreto, es un súper hombre capaz de salir adelante de cualquier eventualidad Nada podrá detenerlo, por lo que la cinta no presentará muchas sorpresas, al contrario, es sumamente predecible Habrá acción al por mayor, explosiones, escenas de balazos, golpes, inventos curiosos y mortales, y un romance entre X y la novia del malo, la bella Yelena (Asia Argento), quien ya no comparte el estilo de vida de su hombre No espere encontrar mucha profundidad en esta película "Triple X" es la misma fórmula de una película de Bond pero llevada al extremo (mucho más exagerada, menos verosímil), y con un agente poco sofisticado, más bien rudo y temerario La pregunta es: ¿Podrá Xander Cage ser el Bond de las nuevas generaciones? Habrá que esperar unas secuelas más, pero de entrada, la película de Vin Diesel no parece poder competir con el encanto y la clase del Agente 007 Con tanta exageración, el filme llega a parecer chocante, aunque la actitud desenfadada del personaje (un "Juan sin miedo"), llega a ser agradable O más, ¿no será que uno se aferra al viejo modelo de agente secreto? Si decide entrar, deje su cerebro fuera de la sala y prepárese para ver las situaciones más absurdas y descabelladas, pero eso sí con mucha acción