México, D F, 31 de mayo (apro)- Como “la más importante de las biografías intelectuales de Octavio Paz” presenta Ediciones Era el libro de Guillermo Sheridan Poeta con paisaje Ensayos sobre la vida de Octavio Paz Paz, quien sin duda “encarna como nadie el siglo XX mexicano”, según retoman los editores de la nota previa de Sheridan, es acompañado por éste “a través de la iniciación militante en los años treinta, del mítico viaje solidario a la España republicana en 1937 y de una decepción crítica que lo hará transitar, bajo la influencia de Víctor Serge y de Jean Malaquais, hacia el socialismo democrático y sus herejías en el mediodía del siglo” El libro ha sido conformado por el profesor e investigador del Centro de Estudios Literarios de la UNAM y exdirector de la Casa de México en París (Los contemporáneos, 1985; México en 1932: la polémica nacionalista (1999) y Un corazón adicto La vida de Ramón López Velarde (1989 y 2002) de acuerdo al siguiente esquema: Una primera parte, los ensayos biográficos: “Infancia de Paz”, “Los guerrilleros de la poesía (1929-1936)”, “El camarada Paz endereza al mundo (1937)”, “Hijo pródigo: regreso y salida (1938-1943)” y “Aquí, allá, ¿dónde? (1943-1968)” En la segunda parte, una entrevista con Paz, realizada a raíz de la publicación (el 20 de agosto de 1997) del primer tomo de la Obra poética de Octavio Paz, titulada “Una apuesta vital” Además, notas, bibliografía e índice onomástico Es decir, un trabajo completo, cuidadoso, y sobre todo asiduo por muchos años en la reflexión e investigación de nuestro Premio Nobel Lo explica así Sheridan en su presentación: “Este libro es la respuesta a la lectura de Paz que comencé hace muchos años Es también resultado de la rara circunstancia que consiste en tratar personalmente a un poeta admirado Mis trabajos sobre historia de la poesía mexicana en las primeras décadas del siglo XX crearon una zona de conversación que coincidía con un ánimo memorioso Ese mismo ánimo prevalecía cuando, mes con mes, al terminar el trabajo en la mesa de redacción de la revista Vuelta, Paz contaba historias, trazaba retratos, contestaba nuestras preguntas con paciencia Más tarde, en el ocaso de sus días, tuve el inesperado privilegio de acompañarlo en algunas conversaciones A veces melancólicas y dramáticas, parecían aliviarlo; otras, ligeras y nostálgicas, desde luego lo entretenían Por el camino de su impecable memoria, íbamos de la preparatoria de San Ildefonso en 1930 al Café París en 1942 Momentos después, la vereda regresaba a Coyoacán, era de nuevo el año 1997, él era de nuevo el agobiado, viejo Lear, y yo el bufón perplejo “El libro es también, si no es que sobre todo, continuación de esas charlas, notas a pie de página, respuestas no dadas a preguntas no hechas, retazos de palabras que se quedaron en el aire Al decir esto, no hago desde luego a Paz, en ningún momento, corresponsable de lo que he escrito Antes bien, he sido yo quien se ha esmerado en ser responsable ante lo que Paz escribió” Si descontamos la quincena dedicada al índice onomástico, no será aventurado decir que el resto de las 569 páginas que forman este volumen serán para el lector de auténtico disfrute y conocimiento