Singapur, 26 de julio (apro) - "Un director popular, es un mal director" La declaración vino del cofundador de la Orquesta Filarmónica de Budapest, Iván Fischer –uno de los más importantes directores de orquesta del mundo—, después de haber recibido una ovación cerrada en el impresionante Concert may, inaugurado en esta ciudad en el 2002 De 53 años, Fischer afirma que los directores que buscan ser populares entre los músicos de sus orquestas corren el riesgo de inflar demasiado sus egos más que servir a la música “No es bueno” De esto y más habló con apro hace unos días durante el Festival de las Artes de Singapur, después de interpretar Canciones Campesinas Húngaras, de Béla Bartók; el Concierto de Violín en D Mayor, de Beethoven; Pavana para una infanta difunta, La Valse y el famoso Bolero --estas últimas tres piezas de Maurice Ravel Ante su éxito, dos encores fueron obligatorios: La Danza Húngara Núm Uno, de Brahms, y una danza eslava, de Dvorák Pero más allá de su talento artístico para dirigir, los movimientos corporales de Fischer fueron todo un espectáculo por sí mismos También su manera entusiasta de estrechar la mano del virtuoso del violín, el alemán Christian Tetzlaff, de 38 años – justo a la manera como se saludan los jugadores de futbol--, fue un elemento más para que el público aplaudiera eufóricamente Invitado de honor en el Festival de las Artes de Singapur, Fischer fue uno de los platos fuertes entre los mil 500 artistas provenientes de 23 países que participaron en el evento artístico más importante aquí Fundador de la Orquesta del Festival de Budapest, junto con Zóltan Kocsis in 1983, ha sido su director desde entonces Hasta ahora, la orquesta se ha presentado en los principales centros musicales del mundo, incluyendo Nueva York, Tokio, París, Frankfurt, London, Roma, Madrid, Atenas y Buenos Aires Entrenamiento de un director --Maestro, juzgando por sus movimientos mientras dirige, usted tiene muy buena condición física ¿Entrena? --Para nada Es extraño, pero dirigir no es una actividad cansada para mí Si trato de subir mis brazos durante dos minutos, me canso; pero si lo hago mientras dirijo, entonces no lo siento --¿Cuál es la importancia de un festival como el de Singapur y cómo ve a su público? --Siempre es positiva una experiencia musical Creo que la música hace mejor a la gente Dirijo de espaldas al público, no lo veo Pero los oigo: si tosen mucho, creo que no están concentrados en la música Pero aquí estaban silenciosos Así que creo que les gustó --La sala no estaba del todo llena, ¿no le afecta? --Me gusta que no se llene, así tosen menos Es cierto, un teatro semi-lleno se reduce el ruido al cincuenta por ciento y se escucha mejor la música --Usted ha dirigido en muchos países ¿Cómo encuentra al público latinoamericano y en especial al de países como México? --Es muy difícil decirlo Pero no creo que las nacionalidades sean importantes La acústica es básica y también si yo me encuentro en buena condición, lo cual no siempre es el caso Algunas veces tengo malos días y si es el caso, el público se aburre mucho y no es su culpa, sino mía --¿Selecciona el repertorio que tocará según el lugar al que va? --No hago ningún tipo de distinción entre los públicos La gente siempre es diferente por fuera Es como una máscara Pueden hablar diferentes idiomas o tener diferente color de ojos Pero por dentro todos somos iguales --Al seleccionar su repertorio, ¿elige lo que le gusta, o lo que mejor funciona para sus músicos? --Un poco lo que señala al final Pero ellos siempre ejecutan lo que me gusta, de otra manera no puedo dirigir una obra --¿Escucha usted las sugerencias de sus músicos en relación al repertorio? --Algunas veces, pero no muy seguido --¿Cuáles son los retos de un director de orquesta? --El problema es que uno no produce el sonido Si tienes un instrumento, produces el sonido Pero yo no lo tengo, sólo tengo a la orquesta No tengo contacto físico con el sonido, tengo que dirigir a través de los demás Es la principal dificultad --Eso es usar a las personas como instrumentos… --Sí, exactamente Ellos son mi instrumento --¿Son los directores de orquesta unos músicos frustrados? --El problema es muy similar al de los entrenadores de futbol El entrenador quisiera jugar en todas las posiciones: defensa o delantero, por ejemplo También me gustaría tocar todos los instrumentos, así sería todo más fácil --¿Es importante que exista una relación personal entre el director de orquesta y sus músicos? --No lo creo Considere a un político: siempre quieren ser populares para ser electos Un director que quiera ser popular es un mal director Los buenos directores no quieren ser populares, debes de servir a la música No a tu ego