Pide especialista clausurar el Panteón de Colima para proteger el patrimonio cultural
Colima, Col , 2 de noviembre (apro)- Con el fin de proteger el patrimonio cultural arquitectónico que encierra desde hace más de un siglo, urge clausurar el cementerio municipal de esta ciudad como institución de servicio funerario, afirma el arquitecto Fernando Macedo Cruz, director de la Pinacoteca Universitaria
Fundado en 1884, y con una superficie de casi 14 hectáreas, el cementerio de Colima ?conocido también como "Panteón de las víboras"-- se saturó desde 1998, pero a partir de entonces las autoridades municipales iniciaron una etapa de reciclamiento y nueva venta de fosas en las áreas de mayor antigüedad que ya nadie reclama
Pero ahora se encuentra prácticamente lleno otra vez, con posibilidades de que, dentro de un año, no cuente con espacio libre para abrir una tumba más
En su investigación "Análisis de alteraciones y deterioros de la sección antigua del cementerio municipal y propuesta de restauración de un monumento", con la que obtuvo el título de maestría en arquitectura por la Universidad de Colima, Macedo Cruz argumenta que no es posible dejar que se siga alternando la fisonomía arquitectónica del lugar
"Las autoridades municipales deben tener como prioridad darle a la sociedad colimense un nuevo cementerio y rescatar el de `Las Víboras`", señala el especialista
Sin embargo, pese a que, desde hace años se ha discutido en esta capital la situación del panteón, la administración municipal anterior no realizó un proyecto en ese sentido, ni la actual ?iniciada el pasado 15 de octubre? ha anunciado gestiones para adquirir un nuevo terreno para la construcción de la obra
De acuerdo con Fernando Macedo, en la parte antigua del panteón, considerado un patrimonio edificado de la sociedad colimense, "la mayoría de los monumentos se encuentra deteriorado y semidestruido y afectadas las particularidades de los monumentos-documentos-históricos; estas afectaciones son espaciales, estructurales, constructivas, ambientales, formales, expresivas y conceptuales"
Explica que las alteraciones que provocan un mayor impacto son las derivadas del reciclaje de terrenos para futuras inhumaciones
"El cementerio, en la parte nueva, está saturado, y en la parte sur de la antigua, surgen, día con día, nuevas lápidas funerarias pegadas una tras otra, siguiendo un trazo específico Estas acciones de reciclado están acabando el concepto original del cementerio (pero), al parecer, nadie se ha dado cuenta de esta característica de nuestro cementerio, que lo hace único e irrepetible", indica
Así mismo, Macedo ubica como peor enemigo de los monumentos funerarios al olvido de todos los sectores: "Desde nuestras autoridades, los académicos y la sociedad en general; de nuestras autoridades, por tratar de manejar nuestra identidad y los rescates patrimoniales con fines políticos", por lo que "debemos derrotar ya las deformaciones patrimonialistas en ejercicio del poder"
Entre las principales causas de deterioro de la parte antigua del panteón, el especialista menciona que la deforestación y la topografía del terreno propician que los escurrimientos pluviales sean el agente de mayor impacto en los monumentos, a tal grado que la mayoría sufren desplazamiento en su verticalidad, lo que ha generado que muchos se hayan colapsado
"Otro agente importante de deterioro es la acción de fuerzas de la naturaleza, como sismos, lo que, aunado a los impactos de la erosión, ha provocado la mayoría de las pérdidas de los monumentos", añade
En suma, dice, la mayoría de los deterioros registrados son consecuencia del abandono en que se encuentra esta sección del cementerio, la falta de acciones de mantenimiento y sus características topográficas, además de las consecuencias de la intemperie, que es la constante principal de la degradación de los monumentos funerarios
Los diferentes tipos de deterioro localizados en el cementerio durante la investigación de Fernando Macedo son originados por manchas, graffiti, polvo, escombros, repintes con pintura de aceite, así como gran cantidad de roedores y jaurías de perros, faltantes de piso, disgregación de ladrillo, desplome de muros, grietas, hundimientos y deformaciones y oxidaciones de la herrería