MÉXICO, D F, 5 de noviembre (apro)- La herencia del arte chicano después de su movimiento de los años 60 y 70, es ahora representado en la exposición que lleva como título Apariciones fantasmales Arte después del movimiento chicano, en el Museo Tamayo de Arte Contemporáneo Se trata de una revisión del trabajo producido actualmente por los artistas estadunidenses de origen mexicano Treinta de ellos (incluidos colectivos y colaboraciones) fueron reunidos con trabajos que van desde la instalación, la pintura, fotografía, video, dibujo, escultura y collage La curaduría estuvo a cargo de Rita González, Howard Fox y Chon Noriega, de Los Ángeles Country Museum of Art, quienes pusieron el título de Apariencias Fantasmales de manera metafórica para significar la cultura fantasmal en la sociedad estadunidense, una cultura vital que no ha sido reconocida ni valorada por la cultura del poder La muestra tiene como principal enfoque rescatar los puntos de vista conceptuales sobre los métodos representativos, y expresar su marginalidad en la esencia de la cultura predominante Por ello, nos encontramos con obras que combinan los espacios públicos y la arquitectura Se rescata el graffiti, el arte callejero, intervenciones en espacios prohibidos, etc, subrayando casi en todos los trabajos una crítica a la institución Amplias y diversas son las propuestas de estos artistas, quienes han optado por crear un arte que solidifique su identidad y, al mismo tiempo, provoque comentarios críticos y políticos al ámbito global y local, combinando la alta y baja cultura Recordemos a Harry Gamboa Jr como el fundador del colectivo Asco en 1981, cuyos miembros crearon sus propias propuestas alternativas, donde realizaban performances y escenificaciones de las fotos fijas que llamaron "No Movies" La influencia de este colectivo tuvo un impulso vital en varios de los artistas aquí presentes También sobresale al trabajo de Rubén Ortiz-Torres, quien ha creado pinturas abstractas basadas en diseños de camuflaje Los dibujos de Jáuregui que han sido inspirados por los disturbios de Los Ángeles en 1992; fotografías de Delilah Montoya mostrando los objetos dejados por los imigrantes en el cruce por la frontera; el trabajo de arte sonido de los Jaichackers (Julio César Morales y Eamon Ore-Girón), quienes exploran varias ciudades en busca de actos musicales locales, graban la música y la mezclan con otros géneros para producir fusiones completamente nuevas Vale la pena acercarse a esta muestra que permite conocer el trabajo de artistas que, como dicen los curadores, enfrentan políticas de espacio con una sensibilidad intensificada por lo global; es decir, la voluntad de situar una identidad local concienzuda y estratégicamente tanto en el mundo artístico como en las calles Después del Tamayo, que se ubica en la primera sección del Bosque de Chapultepec, la muestra continuará su itinerancia después del 11 de enero de 2009 en Texas y Nueva York