MÉXICO, D F, 29 de julio (apro)- En el marco del Primer Encuentro sobre Patrimonio Cultural Inmaterial, realizado en el Museo Nacional de Historia del Castillo de Chapultepec con la participación de más de 60 especialistas, se propuso que las cocinas tradicionales de México se incluyan en la llamada Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial ante la UNESCO Esta lista constituye una enumeración de las propuestas susceptibles de ser presentadas como candidatas a la lista del patrimonio mundial de la Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial, suscrita por México en 2006 Sin embargo, no significa necesariamente que se presente y menos aún, que sea aprobada por dicha Convención de la UNESCO Es una lista tentativa y se han integrado varias del patrimonio tangible que, en los hechos, no llegan ni siquiera a presentarse como candidatas Es el caso, por ejemplo, de los edificios de la fábrica Bacardí, ubicados en la autopista México-Querétaro, a la altura de Cuautitlán, construidos por el arquitecto Mies van der Rohe, que durante el sexenio pasado se incluyeron en la lista representativa Pero, dado que antes de ser presentados a la UNESCO requerían una declaratoria nacional como patrimonio, a la cual se opusieron sus dueños, nunca llegó a la Lista del Patrimonio Mundial La gastronomía mexicana fue impulsada durante los primeros años del sexenio pasado para integrarse a la lista del patrimonio oral e intangible de la humanidad El expediente fue integrado por expertos, entre ellos Cristina Barros y Yuriria Iturriaga, pero el jurado del organismo internacional, entre quienes estuvo el escritor Carlos Fuentes, rechazó la candidatura Impulsaba el proyecto el área de Turismo y Cultura del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), que entonces dirigía Gloria López Morales, quien terminó enemistada con la entonces presidenta del Conaculta, Sari Bermúdez, y escribió el libro Matasari Tribulaciones de la cultura en el sexenio de Fox Ahora es su hermano Francisco López Morales, actual director de Patrimonio Mundial del Instituto Nacional de Antropología e Historia (cargo que ya había ocupado también unos años del sexenio anterior), quien anuncia esta nueva empresa de impulsar las cocinas tradicionales de México e incluirla en la lista tentativa, junto con la Peña de Bernal y los lugares de memoria y tradiciones vivas de los Pueblos Otomí-Chichimecas, ubicados en el semidesierto queretano En el encuentro, en el que se dio a conocer este proyecto, se abordaron los temas Tradiciones y expresiones orales; Artes del espectáculo; Usos sociales, rituales y actos festivos; Conocimientos y usos relacionados con la naturaleza y el universo, y Técnicas artesanales tradicionales