MÉXICO, DF, 30 de junio (apro) - Víctima del cáncer, Pina Bausch, la coreógrafa más importante de Alemania, murió en Wuppertal a los 68 años Su fallecimiento marca el fin de toda una era de trabajo artístico en el campo del teatro-danza, y deja un vacío imposible de llenar, señalaron las autoridades culturales de ese país
Bausch, artista imprescindible de las nuevas tendencias del arte contemporáneo mundial, fue reconocida como el tesoro viviente más cuidado del mundo Su compañía radicada en Wuppertal emitió apenas unas cuantas líneas anunciando la impredecible muerte de su directora y única coreógrafa
Siempre con un cigarro en la mano, la artista nacida el 27 de julio de 1940 en Solingen, Alemania, estaba lista para arrancar una serie de presentaciones en España, y se encontraba muy motivada para estrenar en enero de 2010 una producción en Santiago de Chile, para la cual había recorrido ese país del que es oriundo su viudo
Con un repertorio de 18 obras, Bausch  había impactado de tal manera a su generación de creadores que el propio director italiano Federico Fellini la invitó a interpretar el papel de una princesa ciega en Y la nave va, y el cineasta español Pedro Almodóvar la convenció para llevar al cine algunos de los momentos de Café Müeller en Hable con ella
Bausch y su grupo visitaron México unas cuantas veces; al principio de lo noventa trajeron al Palacio de Bellas Artes y al Festival Cervantino Nelken (Claveles), la cual causó estupor y sorpresa
Se esperaba que la artista regresara a México en el 2007, pero la salida de Ramiro Osorio del Cervantino y el arribo de Sergio Vela a Conaculta complicaron la realización del proyecto, motivo por el que el representante de la artista alemana exigió una millonaria compensación al no concretarse el compromiso ya pactado