Judy Garland en TCM

jueves, 18 de agosto de 2011 · 19:59
MÉXICO, D. F. (apro).- Niña prodigio, voz portentosa y con una tremenda vida personal, la mamá de Liza Minnelli es y será siempre uno de los iconos cinematográficos más carismáticos de todos los tiempos y el canal de cine clásico TCM le dedica su espacio todo agosto y septiembre. Repasan seis aspectos relevantes de ella: que en la pantalla, a los 16 años de edad, le cantó a un retrato de Clark Gable; que la cinta El mago de Oz (1939), por la cual recibió un Óscar especial, la catapultó al olimpo de las divas inmortales. El American Film Institute la ha catalogado entre las diez más grandes estrellas femeninas en la historia del cine del mundo; que en Chicos de Broadway, una pieza musical importante, eclipsaba con su talento. Que en El pitara, de su esposo Vincente Minnelli, se codeó con el bailarín Gene Nelly; que en Ha nacido una estrella, de George Cukor, demostró sus dotes más dramáticas en un papel a su medida ya que tenía mucho que ver con su propia vida. El Óscar estaba más que merecido, pero se quedó en nominación. Y que en ¿Vencedores o vencidos? Le exigieron aparecer con sobrepeso donde también actuaban Burt Lancaster y Marlene Dietrich. TCM proyectará El mago de Oz, de Victor Fleming, el 23 de septiembre, y Ha nacido una estrella el 15 de agosto. El verdadero nombre de esta actriz y cantante era Frances Ethel Gumm (Minnesota, 10 dee junio de 1922-Londres, 22 de junio de 1969). Luego de armar con sus hermanas un grupo de vodevil llamado las Hermanas Gumm, firmó un contrato con Metro Goldwyn Mayer en 1935. Para ese estudio realizó más de veinte filmes. A pesar de sus triunfos profesionales, su éxito se vio opacado por sus problemas psicológicos, adicciones y disturbios financieros. En abril de 1947 sufrió una crisis nerviosa y debido a ello ingresó a un sanatorio privado. Y en julio de ese año realizó su primer intento de suicidio, cortándose las muñecas con un vidrio roto. Después fueron más notorios los problemas emocionales que sufría, ya que no pudo contemplar el rodaje de tres películas en la que fue reemplazada. Comenzó a consumir morfina para poder dormir. Murió prematuramente a los 47 años, debido a las píldoras que tomaba en las noches, los barbitúricos.

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