"Medianoche en París", de Woody Allen, un viaje en el tiempo
MÉXICO, D.F.(apro).- Cuando se pensaba que iba en declive, a sus 75 años, el director estadunidense Woody Allen resurge con esta innovadora cinta, Medianoche en París, manteniendo --con menor intensidad-- su humor y estilo únicos.
Gil Pender (Owen Wilson) es un exitoso guionista, pero novelista frustrado, quien viaja a París con su prometida (Rachel McAdams). En medio de la frivolidad en la que vive, descubre una forma eficaz de saltar en el tiempo cada noche a una realidad fascinante, alucinante, en fin, extinta. Este filme habla de la permanente inconformidad de la gente, la idea de que “todo tiempo pasado fue mejor”. El asunto se complica cuando el pasado se convierte en el presente, y hay que seguir buscando más atrás cada vez.
Hablamos de un excelente director de actores, y qué mejor acompañado que por los protagonistas Carla Bruni, Kathy Bates, Michael Sheen y Marion Cotillard, entre otros. Esta magnífica combinación da como resultado el poder revivir –literalmente-- a los intelectuales y artístas de los 20 en su meca, como Salvador Dalí, Pablo Picasso, Luis Buñuel, Scott Fitzgerald y Ernest Hemingway.
Es extraordinaria la sensación de poder vivir entre gente tan valorada hoy en día, y poder hablar, bailar, comer con ellos, o incluso hasta enamorarte de alguno.
El también director de Annie Hall contrasta los mil y un rostros de la Ciudad Luz, en la que el escenario permanece y lo que cambia es la época, los habitantes, la hora. París ha sido, es y siempre será un ambiente perfecto para la inspiración y un imán de románticos.
Después de haber filmado en ésta y otras de las principales ciudades europeas con financiamiento continental --Match Point, en Londres, y Vicky, Cristina, Barcelona, en Barcelona-- continuará el “tour” hacia Roma, donde realizará Bop Decameron, cuyo estreno está previsto para el 2012.
Medianoche en París se estrenará el próximo viernes 5 en una buena cantidad de salas del país.