Abraham Cruzvillegas expone en la galería Kurimanzutto
MÉXICO. D.F. (apro).- Nuestra imagen actual: autorretratos recientes es el nombre el artista Abraham Cruzvillegas le ha dado a su muestra más reciente. Consiste en una selección de varios dibujos en gran formato, de cuatro por tres metros, realizados sobre papel kraft previamente pintado de blanco con esmalte acrílico. El trazo fue realizado con pintura negra acrílica y una escoba utilizándola a manera de pincel.
Cruzvillegas ha trabajado los últimos años sobre un proyecto que ha titulado Autoconstrucción, transitando en distintas áreas como Autoconstrucción del libro, Autoconstrucción del disco, entre otras. Esta reflexión continúa en el trabajo que presenta actualmente, dibujos donde retrata distintos primates, como los orangutanes, chimpancés, papiones, macacos, gibones, lémures, etcétera., y la similitud con los seres humanos.
Dispone de su interés por la caligrafía oriental para apoyar su reciente propuesta aunando simultáneamente su reflexión social y política.
Los dibujos sobre los primates que ya había realizado años anteriores dibujados con bolígrafo y muchos detalles, así como sus monotipos, han retornado de forma diferente; ahora han sido realizados con gestos sencillos, sin corregir, resaltando la corporalidad de la ejecución donde el movimiento y la expresión revelan una caligrafía en movimiento.
La reflexión personal y universal de las investigaciones científicas sobre la descendencia humana y especialmente donde se afirma que los gorilas son genéticamente más cercanos a los humanos que las cebras a los caballos, dan el inicio de su búsqueda personal, para descubrir estás similitudes, articulando simultáneamente el discurso que ha existido para nombrar a los militares de los regímenes dictatoriales y golpista, llamados coloquialmente gorilas.
Anota también el apodo que se le dio popularmente al presidente Gustavo Díaz Ordaz, a quien se le llamo El Chango, así como a los caricaturistas en nuestro país se les denominó noneros. “Los Monotes” como se les llamó a los dibujos recortados que realizó de joven el pintor mexicano Diego Rivera. De estas y otras más son las inquietudes sociales y pensamientos a partir de nuestra condición de seres que poseemos un pulgar oponible, y su meditación sobre la condición de seguir viviendo en un régimen de represión y de guerra; el artista manifiesta su orgullo por ser un animal, una bestia, un mono.
El trabajo corporal, la admiración y poder de la caligrafía y su propuesta intelectual le imprimen a los dibujos exhibidos una potencia sencilla y vigorosa. Cabe mencionar que el esplendido espacio de la galería ha sido adaptado de tal manera que la obra goza de excelente visibilidad.
La exposición permanecerá abierta al público hasta el mes de febrero 25 en la Galería Kurimanzuto ubicada en la calle Rafael Rebollar 94, Col. San Miguel Chapultepec.