"Voces de un asesino de cara larga y sin sonrisa"

martes, 26 de junio de 2012 · 14:26
MÉXICO D.F. (apro).- Una obra que habla de la violencia de una vida difícil, sin necesidad de recurrir a la violencia en escena, con eufemismos que llevan incluso a provocar la risa ante situaciones extremas como el abuso físico y psicológico, la violación o el asesinato. Los anteriores son algunos de los elementos implícitos en Voces de un asesino de cara larga y sin sonrisa, espectáculo unipersonal a partir del texto de Daniel de la O, ganador del Concurso Nacional de Composición Dramática de Monólogo Víctor Hugo Rascón Banda 2004. Josejuan Meraz es el codirector e intérprete de esta puesta en escena que narra la historia de Buster, personaje solitario surgido de un ambiente hostil desde su infancia, quien encuentra en la figura del actor cómico del cine mudo, Buster Keaton, un alter ego que le permite ocultar sus miedos, inseguridades y particularmente su incapacidad de relacionarse con los demás. Meraz, egresado del Centro Universitario de Teatro de la UNAM, realiza un excelente trabajo histriónico que logra mantener la atención del público a lo largo de aproximadamente una hora, durante la cual nos cuenta detalles de la vida de este asesino, en un tono ingenuo que casi provoca empatía con este personaje hijo de un violador que fue asesinado por la mujer violada. “Lo traigo en la sangre”, afirma con toda naturalidad Buster al compartir su historia de vida. La obra nos permite atisbar en las emociones, sentimientos e ideas de un personaje solitario que, entre otras cosas, tuvo que hacer el nudo de la cuerda con la que se suicidó su madre, además de afrontar las burlas de sus amigos por su cara larga y extraña, sus ojos pequeños y su culo enorme, hasta que decide abrirle la cabeza de un golpe a uno de los burlones, por lo que es expulsado de la escuela. Las acciones se desarrollan en una atmósfera casi onírica, atemporal, dentro de la cual Buster evoca diferentes momentos de su vida, sus múltiples actividades para ganar dinero (bolero, tragafuegos, malabarista callejero, lame culos, etc.) porque --afirma--, la gente siempre compra o vende algo, incluso su cuerpo y su propia integridad. Daniel de la O, discípulo de Juan Tovar, nos ofrece un texto inteligente, pleno de humor negro y sin juicios morales, reforzado con una actuación que en diferentes momentos recurre a la estética del clown y que resume de alguna manera las circunstancias de muchos seres infortunados, con infancias oscuras y escazas oportunidades, que cotidianamente vemos por las calles pero que las más de las veces ignoramos. Mención especial merece el joven equipo de creativos que hicieron posible este montaje, muestra fehaciente de la buena salud de nuestro teatro y garantía de continuar así en el futuro inmediato: Jorge Valdivia, director adjunto; Félix Arrollo, diseño de escenografía e iluminación; Pablo Chemor, música original; y Jesús Díaz, asesoría clown. Voces de un asesino de cara larga y sin sonrisa se presenta en el foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, en una coproducción de Sin Sonrisa Teatro y División del Norte Producciones, los martes a las 20:30 horas.

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