"Prometeo", la Caja de Pandora e Ícaro
MÉXICO, D.F. (apro).- La cinta Prometeo (Prometheus, EU-2012) de Ridley Scott, no nos engaña: trae la tragedia escrita en su nombre. Una afortunada mezcla entre los mitos griegos de Prometeo, Ícaro y la Caja de Pandora, y por supuesto, el horror, como género.
La historia gira en torno a una expedición científica liderada por la doctora Elizabeth Shaw (Noomi Rapace) y por el doctor Charlie Holloway (Logan Marshall-Green), quienes han sido patrocinados por un ricachón para descifrar un secreto: el origen del ser humano.
Según la arqueóloga Shaw y Holloway, el ser humano fue creado por seres provenientes del espacio. ¿Cómo lo saben? Por diversas pinturas rupestres encontradas en diversas culturas que posiblemente sean indicios de contacto extraterrestre.
Los científicos van acompañados de la hija del mecenas en cuestión, Meredith Vicker (Charlize Theron) y de una tripulación compacta que cuenta con un androide bastante particular: David (Michael Fassbender), quien pasó mucho tiempo viendo la película Lawrence de Arabia para copiar sus maneras y comportarse como un ser humano decente, por decirlo de alguna manera.
Al igual que las cintas de Alien --Prometeo bien podría tomarse como una secuela--, los tripulantes del Prometeo sólo encontrarán el horror, que podría poner en peligro la existencia de la humanidad.
El combustible que mueve a todos los personajes es el orgullo, y como en toda tragedia griega, deben ser castigados por ello. Y es que la tripulación del Prometeo busca encontrar a sus creadores o responder a la antigua pregunta ¿de dónde venimos? (lo que vendría siendo, en el sentido mítico, el fuego) para posteriormente llevarlo a sus congéneres en la Tierra.
Si bien la soberbia mueve a todos los personajes, las diferentes personalidades generan matices particulares en los personajes principales, aunque, como buena cinta de terror, hay bastantes que sólo sirven de relleno.
Lo interesante y lo que es realmente terrorífico es el juego entre el orgullo del ser humano, su capacidad para viajar por el universo, su ambición y su sed de conocimiento. Y como ocurre muchas veces en las cintas de ciencia ficción, el resultado pocas veces se traduce en beneficios para la humanidad.
Prometeo es una estupenda película que más allá de meterle uno que otro susto, le dejará con reflexiones interesantes.