MÉXICO. D.F. (apro).- Collages de Álvar Carrillo Gil es la pequeña muestra que presenta el MACG en el espacio Gabinete Gráfico. Álvar Carrillo Gil (Yucatán- 1898-1974) fue médico pediatra, quien además de su brillante carrera realizó una valiosa colección de pinturas, reunidas en el museo de arte contemporáneo que lleva su nombre, encargado a Fernando Gamboa así como al arquitecto Augusto H. Álvarez. La curadora María Ibari Ortega presenta esta selección de collages de pequeño formato como homenaje al coleccionista y artista autodidacta. Fue en 1950 que Carrillo Gil empezó a producir prolíficamente pinturas y collages. Es sumamente interesante contemplar este trabajo que encierra una poesía personal, sutil y cuidadosa, pues cada collage posee delicadeza y dominio del espacio donde se respira serenidad y contemplación. Su interés particular por las vanguardias europeas de principios del siglo XX y la abstracción en particular parece ser una fuente inspiradora en su trabajo. La museografía se singulariza por pintar todo el espacio de rojo, así como los marcos de las pequeñas piezas. Pero esta propuesta distrae la atención para acercarse al universo silencioso que encierra cada pieza. “Siempre di nunca” Alejandro Magallanes (Ciudad de México, 1971) ilustrador, diseñador y artista plástico, muestra por primera vez su trabajo de manera individual. La curaduría estuvo a cargo der Carlos Palacios, quien ha dicho que “esta exposición es paradigmática ya que el artista despliega todo su intenso imaginario, que discurre por un catálogo de temas y personajes en situaciones que irradian una malicia infantil e irónica, a partir de un ejercicio crítico que desliza a través del arte popular y hasta las bellas artes… desde la realidad hasta la ficción”. El trabajo de Magallanes es conocido dentro del diseño gráfico, pues ha realizado una extensa producción para carteles de películas, festivales de teatro, poesía y ópera, entre otros muchos. La oportunidad de esta muestra es que dispone de su trabajo en otras áreas: fotografía, animación y escultura. Se exhiben muchas de sus libretas de dibujos, donde encontramos un particular y vital vocabulario, de manera casi siempre divertida, irónica y fresca traduce pensamientos, ocurrencias, actitudes y visiones del mundo que rodea al artista. Los terrenos del lenguaje escrito también inquietan a Magallanes, quien ha logrado sumergirse en su obra con humor e irreverencia.