MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- En el regreso de Diego Luna a los escenarios teatrales con el monólogo Cada vez nos despedimos mejor, de Alejandro Ricaño, nos encontramos las complicaciones del romance entre Sara y Mateo.
La historia de la pareja fluye a través de casualidades contextualizadas dentro de algunos de los más representativos acontecimientos de la escena política contemporánea del país (desarrollados entre 1979 y 2012).
Por ejemplo, el fraude electoral a Cuauhtémoc Cárdenas o los tropiezos del entonces candidato presidencial Enrique Peña Nieto en la Feria del Libro de Guadalajara, cuando no supo decir cuál era su libro preferido.
El hilo conductor de la puesta, la historia amorosa, es un planteamiento desgastado y simple que no ahonda demasiado en los afectos y conflictos surgidos en las relaciones interpersonales, pues enuncia las típicas confusiones y engaños de la narrativa amorosa de propiedad que se fomenta sobre todo a los jóvenes.
Por otro lado, lo que parece novedoso dentro del libreto, es plantear el marco histórico de los sucesos sociales en que ocurren los momentos importantes de la relación, aunque poco sustancioso.
Y es que si se pretendía llevar al público a la reflexión histórica y política sobre la vida nacional, no se logró, ya que a los referentes sociales se les simplificó al despojárseles de un discurso político sólido y ser usados sólo para generar la obvia comedia producida comúnmente en la oferta cultural del país.
Pese a esta superficialidad narrativa, Diego Luna (Mateo) logra capturar e involucrar al espectador a lo largo de hora y media. Asimismo resulta muy destacada la ambientación musical compuesta por Alejandro Castaños, acompañada por intervenciones en vivo de Darío Bernal, quien en las presentaciones de este fin de semana será sustituido por Gibrán Andrade.
La pieza de Ricaño se estará presentando hasta el 12 de enero de 2014 en la Sala Chopin (Álvaro Obregón 302, Col. Roma), con funciones viernes a las 20:30 horas, sábados a las 19 y 21 y domingos a las 18 y 19:30. Las localidades tienen un costo de 330 pesos.