Semillas de vida, la sexualidad en Occidente

lunes, 22 de septiembre de 2014 · 11:48
MÉXICO, D.F., (proceso.com.mx).- Previo a la evangelización católica en México, la sexualidad y el cuerpo humano eran temas tratados con naturalidad en las culturas prehispánicas; ejemplo de ello es la exposición Semillas de vida. La sexualidad en occidente, que se presenta en el Museo del Templo Mayor. En un recorrido por las dos salas destinadas a esta muestra temporal, Juan José Arias Orozco, subdirector de museografía, explicó a proceso.com.mx: “Sin duda lo que se pretende es darle a conocer al público un tema que normalmente no se aborda dentro de las investigaciones relacionadas con la arqueología mexicana, la sexualidad, afrontada aquí en dos vertientes: la parte ritual y el punto lúdico”. La muestra, presentada en el marco de los 75 años del Instituto Nacional de Antropología e Historia, y en el centenario del descubrimiento del Templo Mayor, incluye 188 piezas provenientes de los museos regionales de Colima, Jalisco, Nayarit y Michoacán, así como del Museo Soumaya. Estará abierta hasta el 28 de septiembre, para después viajar al Museo Regional de la Laguna, de Torreón, Coahuila. El visitante podrá ver representaciones escultóricas en cerámica capacha realizadas hacia el 1500 A.C., aunque la gran mayoría proviene de la fase ortices de entre 200 A.C. al 400 ó 600 de nuestra era. Se caracteriza por hombres desnudos con el falo erecto, mujeres igualmente desnudas, embarazadas, en labor de parto, amamantando a sus hijos, o bien a parejas en posiciones sexuales. “En el centro del país hubo una preocupación por la representación de aspecto asociados a la cosmovisión y la guerra, en zonas maya a la ciencia, mientras que en el occidente se puede decir que trataron de representar las imágenes de lo cotidiano, gente en convivencia, músicos tocando, danzantes, la venta, hombres y mujeres como instantáneas que reflejaban lo cotidiano. “Digamos que pusieron énfasis en la representación de lo masculino y femenino, de manera que vemos en muchas de ellas decoración con círculos concéntricos o espirales, relacionados con los caracoles, y estos a su vez con la fertilidad”, explicó Arias. Durante el recorrido podrá ver algunas imágenes y audiovisuales a través de los siete apartados divididos en dos salas: Mujer y fertilidad; cuerpo y desnudez; Los géneros y su rol; Un mundo dual; Sepulturas, reflejo de la dualidad sexual; El hombre y el culto fálico; y El simbolismo de lo femenino. Se lee en la entrada de la muestra: “Para los antiguos mesoamericanos el cuerpo, en varios sentidos, constituía una referencia sobre el universo, de manera que muchas de las concepciones fundamentales sobre la existencia se vinculaban con él. Por otra parte, el deleite sexual y el gozo de la procreación se consideraban dones otorgados a los hombre dese el ámbito divino". A diferencia de otras exposiciones, ésta, al ser muy corta, permite al público detenerse vitrina por vitrina y admirar cada pieza; su ordenamiento temático hace afable el recorrido. --¿Hay alguna pieza central o importante en la muestra? --No, hay piezas que tienen relevancia especial, pero no existe una estrella, las que aparecen en el cartel por ejemplo se eligieron por su importancia estética, su decoración y elocuencia, pero hay otras mucho más sencillas, pequeñitas, que son igual elocuentes. Algunas llaman la atención por su curiosidad y son poco comunes porque no estamos acostumbradas a verlas, como la de un hombre masturbándose o las de parejas en plena convivencia, pero en general todas son significativas.” --¿Cuál es la relevancia de la exposición? --Es única en su tipo hablando del tema. En cuanto a pintura ha habido exposiciones de escultura contemporánea, pero no una arqueológica que yo sepa. En el Museo del Cuale de Puerto Vallarta, Jalisco, había un apartado pequeño de unas 50 piezas prehispánicas pero no con una intención como ésta. Semillas de vida. La sexualidad en Occidente permanecerá hasta el domingo 28 en el Museo del Templo Mayor (Seminario 8, Centro Histórico), con horario de 9 a 17 horas.

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