PUEBLA, Pue. (apro).- Integrantes del Comité Defensor del Patrimonio Histórico Cultural y Ambiental de Puebla y la Fundación Manuel Toussaint denunciaron la destrucción de una casona del Siglo XVII ubicada en la calle 3 Poniente número 319 de esta ciudad, que se encuentra protegida por el Catálogo Nacional de Monumentos. En un acto simbólico, los académicos acudieron al edificio para colocar un pegote de “clausurado”, luego de denunciar que ni las autoridades locales, ni el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), realizan su trabajo de preservar el patrimonio cultural de esta ciudad, considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La historiadora Rosalva Loreto señaló que sin tener en su exterior la licencia de construcción del INAH, la casa es demolida en su interior y en las noches se sacan camiones de escombros de lo que fue su arquitectura. Con esto, indicó, se presume que sólo dejarán en pie la fachada del inmueble, igual que ha ocurrido con otros edificios del Centro Histórico de Puebla. “Como si se tratara de una escenografía”, reclamó. Explicó que la casa forma parte de un conjunto histórico y arquitectónico cuyo crecimiento dependió de la construcción del convento y el templo de San Agustín, que abarcó dos manzanas completas. “Su construcción dio inicio con el permiso otorgado hacia 1546, cuando por el virrey don Antonio de Mendoza hizo llegar la autorización de su fundación. La construcción fue lenta, concluyéndose en 1629”, relató. Loreto explicó que el inmueble que ahora es demolido en su interior, es de importancia histórica porque fue planeado como un camino de entrada y salida de la ciudad hacia Cholula, y en su tránsito con los barrios y tlaxilacales indígenas del poniente y la zona de huertas privadas que conformaban los límites urbanos. El inmueble se encuentra en el Catálogo Nacional de Monumentos con el número 211140016289 y el número de Catastro 4025018, pese a lo cual empezó a ser derruido, como ya ocurrió con la casona del Torno, en el Barrio del Artista, también protegida y demolida en su totalidad. En el caso de la casa del Torno, al demostrarse que nunca debió ser destruida por estar catalogada, este año fue reconstruida. Sin embargo, los especialistas consideran que el daño al patrimonio cultural de Puebla es irrecuperable, ya que difícilmente se puede restituir una casona que fue levantada en el Siglo XVII. Acompañados de Monserrat Gali, historiadora de Arte, y el arquitecto Ambrosio Guzmán, los integrantes del Consejo Ciudadano del Centro Histórico señalaron que han pedido que se ponga un alto a la destrucción al patrimonio edificado de Puebla, pero no han sido escuchados. “Hemos esperado que el INAH, la Gerencia del Centro Histórico y la Comisión de Regidores del Centro Histórico cumplan con su deber y obligación en función de las atribuciones que les son inherentes al estar a cargo de la preservación del Centro Histórico de Puebla”, mencionó Loreto. Añadió: “Lamentablemente estas instituciones, sus organismos y funcionarios han dado muestras de su ineficiencia o desconocimiento de la problemática, cuando en repetidas ocasiones se han otorgado licencias que violan las normas que se deben seguir en la readecuación y rehabilitación del Patrimonio edificado”. En ese sentido, subrayó, se han permitido intervenciones que violan la Ley Federal de Monumentos y Sitios, dado que no se lleva a cabo la pre evaluación de los proyectos y se trata de justificar la destrucción de los inmuebles ya cuando esto es un hecho consumado. Como ejemplo, los especialistas mencionaron las obras del Hotel City Express y el conjunto de edificaciones del barrio de San Francisco, que dejaron subsumida a la capilla del Cirineo y los lavadores de Almoloya. De acuerdo con Gali, a la par que se aprueban este tipo de obras que afectan edificios históricos, las autoridades dilatan el acceso oportuno a la información con el fin de evitar que los especialistas puedan recurrir a acciones legales para detener la destrucción. “Por ello, ambas organizaciones hemos considerado convocar a la ciudadanía y al resto del Consejo del Centro Histórico a tomar una acción concreta clausurando simbólicamente esta obra para mostrar nuestro desacuerdo no sólo con los implicados en el proyecto de remodelación del citado inmueble, sino con los funcionarios que han permitido que esto ocurra sistemáticamente en Puebla a lo largo de los últimos años”, manifestó. Otra edificación Los académicos también censuraron que las autoridades permitan construcciones como la que se realiza en las calles 3 Oriente y Boulevard 5 de Mayo, que rompen con el estilo arquitectónico de Puebla. Se trata de la fachada de lo que será un hotel, ubicado en la entrada del Barrio de los Sapos, uno de los paseos tradicionales de esta capital. “Aquí es el tipo de construcción que autorizaron, la altura no está permitida, es un masacote que rompe que con todo el paisaje”, reclamó Gali.