SAN CRISTOBAL DE LAS CASAS, Chis. (apro).- Con el largometraje de ficción español El árbol del abuelo (El olivo, 2016), de la reconocida Icíar Bollaín, comenzó la segunda edición del Festival Internacional de Cine de San Cristóbal de las Casas, Chiapas (FICSC), el cual se centra en los tópicos migración y sustentabilidad. Es la octava cinta de la realizadora con guion del célebre Paul Laverty (ganador del premio a Mejor Guión en Cannes del 2012). La trama, basada en una nota periodística, se centra en Alma, una adolescente que intenta recuperar un olivo milenario, antes plantado en tierras de su abuelo y después vendido y trasplantado como decoración a un lobby corporativo en Alemania. El filme, rodado en Alemania, España y Francia, es un road movie que impulsa a reflexionar sobre la transculturación socioeconómica, acelerada por los efectos de la crisis. Aquí, el olivo del abuelo, símbolo de la naturaleza mediterránea, es vendido para decorar las instalaciones de un centro financiero. La historia también refleja la relación entre un hombre mayor con su nieta y toca la vejez y sobre todo la crisis económica de España. La inauguración, ocurrida la noche del miércoles 8 en el Teatro Hermanos Domínguez, la condujo la actriz Arcelia Ramírez, y el director del FICSC, Miguel Camacho, destacó el compromiso del festival “por llevar a Chiapas el mejor cine del mundo”. Además, escribió en el catálogo del programa: “Corren tiempos difíciles para el mundo y muy especialmente para el arte, la cultura y la naturaleza, por lo que es papel de los creadores seguir en la brega, cuestionar, señalar los obstáculos, explorar caminos, ofrecer la luz de las palabras y las imágenes, los colores, la música, acciones concretas. “Desde el cine, no podemos quitar el dedo del renglón. En tiempos de muros, apostamos por un cine que tiende puentes y nos hermana con otros.” Al acto asistió Nuria Sanz, representante de UNESCO en México, quien destacó que “la cultura es el motor principal del desarrollo” y entregó el reconocimiento Ciudad Creativa a San Cristóbal de Las Casas. Acudieron a la inauguración los cineastas Jorge Fons y Juan Carlos Rulfo, quienes forman parte del Jurado del FICSC; la actriz Oona Chaplin (nieta de Charles Chaplin), el realizador argentino Ariel Rotter, el documentalista austriaco Hubert Sauper, el productor francés Marc-Benoit Créancier y las actrices mexicanas Blanca Guerra, Maya Zapata y Sofía Espinosa. El FICSC lo conforman alrededor de cuarenta largometrajes entre sus secciones de competencia (ficción y documental), Pulso del Mundo, Tiempo y Memoria, funciones especiales y proyecciones al aire libre y un ciclo de charlas en los cuales especialistas y académicos debatirán con cineastas, productores y con el público asistente.