CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El historiador Miguel León-Portilla fue nombrado Ciudadano Distinguido de la Ciudad de México por “promover la cultura indígena y la historia de México”. Con un pergamino y una medalla, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, reconoció ese mérito al especialista en un acto en el Salón de Cabildos del Antiguo Palacio del Ayuntamiento. Luego de asegurar que era un orgulloso habitante de esta ciudad, el también filósofo y autor de La visión de los vencidos. Relaciones indígenas de la Conquista, quien recientemente cumplió 90 años, subrayó la necesidad de promover la poesía y enaltecer la historia de la capital del país, sobre la cual dijo: “La Ciudad de México tiene una larga historia, a veces dramática, a veces trágica, pero siempre interesantísima y en grandes momentos maravillosa… En tanto que dure el mundo, así durará la fama de México-Tenochtitlán”. En su turno Mancera enalteció la obra del especialista en lengua y literatura náhuatl: “Es un honor que haya aceptado este mérito, es un honor que en esta sala de cabildo se encuentre un habitante muy distinguido de la Ciudad de México, celebrar y reconocer su trayectoria nos llena de orgullo y nos permite comprender lo que transmite, que la Ciudad de México tiene un pasado que define nuestro presente y marca las líneas de nuestro futuro… “Ha puesto en el centro a los indígenas, ha puesto en el centro una atención que hoy la Ciudad de México tiene que cuidar como algo preciado, como ese tesoro debemos cuidar a nuestros pueblos, a nuestros barrios originarios, como ese tesoro los debemos incluir también en esta nueva Constitución, la primera Constitución de la Ciudad de México”, convocó Mancera. Al término de la ceremonia, León-Portilla firmó en la Sala de Virreyes el Libro de Ciudadanos Distinguidos de la ciudad. El historiador nació en la Ciudad de México el 22 de febrero de 1926. Realizó el doctorado en Filosofía en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde también es investigador emérito, además de miembro de la Academia Mexicana de la Historia y de El Colegio Nacional. Entre sus distinciones destacan la medalla Belisario Domínguez, el Premio Nacional de Ciencias Sociales, Historia y Filosofía, y la medalla Fray Bernardino de Sahagún. El pasado 22 de febrero la máxima casa de estudios le rindió un magno homenaje con motivo de su 90 aniversario, donde el rector Enrique Graue reconoció al historiador como un “ícono universitario”. La figura de León-Portilla logró reunir en ese momento a los exrectores Francisco Barnés, Juan Ramón de la Fuente, José Sarukhán Kermez y Guillermo Soberón, así como a arqueólogos, historiadores, autoridades universitarias, comunidad estudiantil y discípulos como Patrick Johannson, quien se refirió al filósofo como el “nahuatlato por excelencia”: “Es preciso señalar que Miguel León-Portilla tiene el don de lenguas, porque lee, habla y escribe en español, inglés, francés y náhuatl. Lee y habla alemán, italiano y portugués. Y lee latín y griego. Dominar la lengua náhuatl le permitió reconstruir los pensamientos de los antiguos indígenas”, refirió Johannson.