CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El arquitecto, urbanista, autor y crítico de la arquitectura, Manuel Larrosa, falleció la madrugada de este lunes en su casa de Tepoztlán, Morelos a consecuencia de un padecimiento pulmonar, informó el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). Considerado por Fernando González Gortázar, su colega, como “uno de los pocos arquitectos rebeldes”, Larrosa recibió el pasado viernes 2 la Medalla Bellas Artes por su trayectoria. En esa ocasión, la directora general del INBA, María Cristina García Cepeda, calificó la obra de Larrosa como “un ejemplo conmovedor de su preocupación que responda a las necesidades esenciales y a los derechos de los ciudadanos”, y lo consideró “un humanista comprometido con la creación, el estudio, la valoración y la difusión del patrimonio artístico”. En su Twitter, Enrique Peña Nieto utilizó las mismas palabras para referirse a la muerte del afamado arquitecto: “Sentimos la pérdida de Manuel Larrea, comprometido con la creación, estudio y valoración del patrimonio de México. Descanse en paz”. Cuando recibió el galardón, el urbanista resaltó que la arquitectura es una “puerta al infinito” y “compañera solidaria” de la vida de cualquier persona desde la primera habitación hasta la tumba. Larrosa realizó sus estudios en la Universidad Nacional Autónoma de México, y ya como profesional trabajó con el arquitecto Guillermo Rossell de la Lama en obras como la Capilla Abierta y la Plaza de los Abanicos en Cuernavaca, Morelos, además del Instituto Tecnológico de Nuevo Laredo, Tamaulipas. De forma individual construyó la aduana de Tijuana y el Teatro Casa de la Paz, que cuenta con un mural creado por Manuel Felguérez. También construyó edificios en condominios y casas unifamiliares en las ciudades de México, Guadalajara, Cuernavaca y Los Mochis. Como urbanista desarrolló los planos de las ciudades de Tijuana, Mexicali y Ensenada, y creó un proyecto denominado Museo Dinámico, que consistió en habilitar las edificaciones como salas de exhibición y para montajes escénicos. Albergó la obra de artistas como el propio Felguérez, Vicente Rojo y Alberto Gironella, y montaron sus obras Juan José Gurrola y Alejandro Jodorowsky. También fue autor de diversos textos sobre arquitectura y urbanismo publicados en diarios y revistas, y escribió libros sobre los arquitectos Abraham Zabludovsky, Ángel Borja y Fernando González Gortázar. En 2007 la entonces Dirección General de Arquitectura publicó en el número 13 de Cuadernos de Arquitectura, bajo el título Periodismo arquitectónico, una recopilación de medio centenar de artículos escritos por el arquitecto Larrosa entre los años ochenta y noventa del siglo pasado. A propósito de esos escritos, la reseña publicada por la agencia Apro destacó: “Se advierte el espíritu crítico que el especialista imprimió a su mirada sobre el quehacer nacional en este arte. Valiosa aportación si se toma en cuenta que, fuera de las publicaciones especializadas, pocos espacios se han dedicado a observar para un público masivo los desastres y desatinos de la arquitectura contemporánea, sobre todo en la Ciudad de México, que los ha visto proliferar para desgracia de sus habitantes. Una defensa radical del urbanismo”. Tras la muerte de Larrosa, el secretario de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa, expresó en su cuenta de Twitter: “La obra del arquitecto Manuel Larrosa es un orgullo para México, reconocida internacionalmente. Lamentamos su deceso”.